Las autoridades de salud indicaron que según cifras reportadas por la cuenta de alto costo, entre el 1 de julio de 2020 al 30 de junio de 2021, se reportaron 980 nuevos casos de hipertensión y una prevalencia de 21.005 casos, para un total de 21.101 pacientes con diagnóstico de hipertensión Arterial, en Casanare.
De acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud (OPS): “La enfermedad cardiovascular (ECV) es la principal causa de muerte en las Américas y la presión arterial elevada (hipertensión) representa más del 50% de las ECV. Desafortunadamente, en esta región, más de una cuarta parte de las mujeres adultas y cuatro de cada diez hombres adultos tienen hipertensión, y el diagnóstico, el tratamiento y el control son subóptimos”.
Es fundamental que la medición de la presión arterial sea exacta para el diagnóstico efectivo. Esto se puede lograr con el uso de tensiómetros adecuados, aplicando la técnica correcta de medición y la preparación del paciente.
El doctor Pedro Olegario Cruz, profesional universitario de la Secretaría de Salud, señala que “la mayoría de pacientes desconocen el tener esta enfermedad, pero hay quienes presentan síntomas como dolor de cabeza, zumbido de oídos, mareos, visión borrosa, dolor en el pecho o lumbar, vómitos y sangrado nasal. Por lo que es importante que se practiquen de manera oportuna los chequeos médicos”.
El profesional agrega que algunas causas para padecer esta enfermedad pueden ser los altos niveles de estrés, consumo excesivo de sodio, ser una persona fumadora y sedentaria, tener antecedentes familiares de hipertensión o padecer sobrepeso u obesidad.
Por lo que recomendó “aquellas personas con antecedentes familiares de abuelos o padres con hipertensión deben acudir periódicamente a los centros de salud o con el médico familiar a practicarse controles de presión arterial, colesterol y glucosa en sangre, para asegurar un estado óptimo de salud”.
Para este 2023, se destaca la importancia de realizar un diagnóstico preciso para proporcionar el inicio del tratamiento oportuno de la hipertensión arterial o intensificar su tratamiento cuando esté indicado, evitando al máximo posible la aparición de desenlaces graves e incluso fatales y mejorando la expectativa de vida de las personas que padecen esta enfermedad.
Cuando la presión arterial es alta, el corazón tiene que bombear con más fuerza, lo que aumenta el riesgo de daño al corazón y los vasos sanguíneos en órganos como el cerebro, los riñones, los ojos, entre otros.
Por último, la hipertensión arterial no controlada puede producir discapacidad y dañar la calidad de vida de las personas.