El centrocampista del Barcelona Gabriel Cortéz, máximo goleador de la liga ecuatoriana con 7 tantos en 9 partidos, es una de las 18 personas detenidas este viernes como parte de un operativo policial contra una banda criminal de Esmeraldas, provincia costera fronteriza con Colombia.
Aunque no mencionó su nombre, la detención de Cortéz fue confirmada por el ministro del Interior, Patricio Carrillo, durante una conferencia de prensa desde Esmeraldas donde aseguró que el futbolista, de 26 años, «ordenaba y recibía la información respecto a las personas que los sicarios» habían asesinado.
En redes sociales, se difundió la foto de Cortéz en el momento de su detención, custodiado por dos policías fuertemente armados.
Cortéz, apodado ‘el Loco’, es una de las figuras del actual torneo de fútbol de Ecuador, al acumular siete goles en las primeras nueve jornadas.
Sin ir más lejos, el volante participó hasta el miércoles pasado en la derrota por 0-1 de su club ante el Gualaceo, uno de los equipos más modestos de la liga ecuatoriana.
En un comunicado, el Barcelona anticipó que «respetará las diligencias e investigaciones de los órganos de justicia» y deslindó de cualquier responsabilidad o complicidad en los presuntos delitos cometidos por Cortéz, quien anteriormente vistió las camisetas del Botofogo brasileño y los Lobos BUAP de México.
En ese sentido, el club de Guayaquil aclaró que «las actividades realizadas en el ámbito privado por sus jugadores y directivos son ajenas a la institución».
La institución deportiva también señaló que esperará las resoluciones que tome la Justicia para evaluar qué medidas toma con respecto al jugador.
Además del futbolista, entre los 18 detenidos se encuentran tres policías en servicio activo.
Durante el operativo policial se realizaron allanamientos en 29 inmuebles que dieron también como resultado la incautación de tres vehículos, 14 teléfonos móviles, tres cámaras de vigilancia y un kilo de droga.
El operativo, denominado «Operación Gran Impacto 10», fue ejecutado por la Policía Nacional de Ecuador conjuntamente con la Fiscalía General del Estado contra la banda criminal denominada «Los Tiguerones».
Las autoridades vinculan a «Los Tiguerones» con el Frente Oliver Sinisterra, un grupo disidente de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que opera cerca de la frontera con Ecuador y al que se le atribuye el secuestro y asesinato de tres periodistas ecuatorianos en 2018.
De acuerdo al comandante general de la Policía de Ecuador, las detenciones se realizaron tras una investigación que duró cuatro meses donde se recabó la información para solicitar a la Justicia las órdenes de captura.
A «Los Tiguerones», las autoridades ecuatorianas les imputan los delitos de narcotráfico, terrorismo, asesinato, sicariato, extorsión, tráfico ilícito de armas y de municiones explosivos.