Ucrania prometió la victoria contra Rusia y aseguró que prepara una nueva contraofensiva, cuando se cumple el primer aniversario del conflicto armado en Europa más largo desde la Segunda Guerra Mundial.
«Hemos resistido. No hemos sido derrotados. Y haremos todo lo necesario para lograr la victoria este año», afirmó el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, en un mensaje difundido en redes sociales.
«Ucrania ha inspirado al mundo. Ucrania ha unido al mundo«, agregó, calificando a las ciudades escenario de presuntos crímenes de guerra rusos, como Bucha, Irpin y Mariúpol, de «capitales de la invencibilidad».
Ucrania no descansará «hasta que los asesinos rusos reciban el castigo que merecen», agregó.
Con la misma determinación, el ministro de Defensa de Ucrania, Oleksii Reznikov, prometió una contraofensiva: «Atacaremos con más fuerza y desde mayores distancias, en el aire, en la tierra, en el mar y en el ciberespacio. Habrá nuestra contraofensiva. Estamos trabajando duro para prepararla».
Las tropas rusas entraron en Ucrania el 24 de febrero de 2022, dando inicio al peor conflicto en suelo europeo desde el fin de la Segunda Guerra Mundial.
Doce meses después, numerosas ciudades ucranianas quedaron en ruinas, una parte del país vive bajo ocupación rusa y el balance de muertos y heridos en cada bando supera los 150.000, según estimaciones occidentales.
«Guerra ilegal»
Occidente ha impuesto sanciones cada vez más estrictas a Rusia y ha aumentado la ayuda humanitaria y el suministro de armas a Ucrania, lo que provocó advertencias de Moscú sobre una escalada peligrosa.
La Asamblea General de la ONU aprobó el jueves por 141 votos a favor, 7 en contra y 32 abstenciones una resolución que exige que Rusia «retire de inmediato, por completo y sin condiciones, todas sus fuerzas militares» de Ucrania.
En el aniversario del primer año de conflicto se multiplicaban las muestras internacionales de apoyo.
La Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) aseguró el viernes en un comunicado que está «decidida a apoyar a Ucrania», llamando al gobierno ruso a poner fin inmediatamente a su «guerra ilegal» y exigiendo que las autoridades de Moscú respondan por sus «crímenes de guerra».
En París, la Torre Eiffel se iluminó con los colores amarillo y azul de la bandera ucraniana.
«Pueblo de Ucrania, Francia está a vuestro lado. Por la victoria. Por la paz», tuiteó el presidente francés, Emmanuel Macron.
En Londres, se llevará a cabo un minuto de silencio frente a la embajada rusa en presencia de diputados y diplomáticos.
Y en Alemania, donde se prevé una protesta frente a la embajada rusa en Berlín, el jefe de gobierno, Olaf Scholz, dijo en un vídeo que Putin «no alcanzará sus objetivos imperialistas».
China, que ha tratado de posicionarse como parte neutral en el conflicto mientras mantenía estrechos vínculos con Rusia, presentó el jueves una propuesta de «solución política» al conflicto en la que urge al diálogo, advierte contra el uso de armas nucleares e insta a no atacar a civiles.
«Todas las partes deben respaldar a Rusia y Ucrania para trabajar en la misma dirección y reanudar el diálogo directo lo más rápido posible», afirma Pekín en el documento de doce puntos difundido por el ministerio chino de Exteriores.
El año más difícil
Los servicios de información ucranianos señalaron el riesgo de «provocaciones a gran escala» por parte de Rusia durante la jornada, incluyendo campañas de bombardeos.
Los ucranianos admiten su cansancio tras un año al ritmo de alertas antiaéreas y privados con frecuencia de electricidad y agua por los bombardeos, pero confían en un desenlace favorable del conflicto.
Oksana, una habitante de Kramatorsk (este) de 60 años, reconocía «vivir con miedo» y esperaba «la paz». «Queremos que esta guerra termine, estamos cansados de vivir así«, lamentó.
Según un sondeo reciente en el país, el 17% de los ucranianos había perdido a un ser querido en la guerra y un 95% confiaban en la victoria.
«Hasta Polonia»
Rusia apostaba inicialmente por una victoria rápida que permitiera mantener a Ucrania dentro de su esfera de influencia.
Un año después, y tras significativos e inesperados reveses militares, aún espera conquistar las cuatro regiones del este y el sur, que proclamó bajo su soberanía, en especial alrededor de la ciudad de Bajmut, asediada desde hace meses.
El jefe del grupo paramilitar ruso Wagner dijo el viernes que sus tropas habían tomado el pueblo ucraniano de Berjivka, justo al norte de Bajmut.
Por su parte, el expresidente y número dos del Consejo de Seguridad ruso, Dmitri Medvédev, aseguró que su país logrará la «victoria» y que están dispuestos a llegar hasta las fronteras de Polonia.
Estados Unidos y los países de la Unión Europea (UE) aportaron ayudas por más de 128.000 millones de euros (135.000 millones de dólares) a Ucrania, según el Kiel Institute for the World Economy.
Estados Unidos anunció el jueves que prepara nuevas sanciones «considerables» y un nuevo paquete de ayuda militar de 2.000 millones de dólares.
Reunidos en India, los ministros de Finanzas del G7 discutieron nuevas sanciones y aumentaron su respaldo económico a Kiev hasta 39.000 millones de dólares.