El actual presidente de El Salvador, Nayib Bukele, busca ampliar su mandato por cuatro años más, después de inscribir su candidatura presidencial ante el Tribunal Supremo Electoral.
El mandatario oficializó su candidatura acompañado de una multitud de centenares de personas que lo arengaba y alentaba para mandar en el país centroamericano por un nuevo cuatrienio. Bukele asistió junto con su vicepresidente, Félix Ulloa bajo la bandera del movimiento Nuevas Ideas, a menos de una hora de cerrarse el plazo de inscripciones.
Había especulación por que se acercaba la hora límite para presentarse y algunas fuentes informaron que el mandatario se encontraba en un hospital privado de Santa Elena porque habían vehículos del batallón presidencial a las fueras del recinto.
Los rumores frente al estado de salud de Bukele se acrecentaron después de que el presidente de la Asamblea Legislativa, Ernesto Castro, y el diputado Christian Guevara manifestaran que se encontraban orando por la salud del mandatario salvadoreño.
Varios miembros de su partido se pronunciaron a través de X con mensajes de apoyo a Bukele; entre ellos, el ministro de Obras Públicas, Romero Rodríguez, y el alcalde de San Salvador, Mario Durán.
Entre la popularidad y el exceso
Las opciones de Bukele de perpetuarse en el poder son muy altas. Su índice de aprobación no solamente es el más alto para un presidente en Latinoamérica, sino también del mundo, con un 90% de aceptación popular.
Su férrea lucha contra las pandillas salvadoreñas le han valido tanto halagos, como críticas de sectores de izquierda de la política de este lado del continente y de distintas ONG. Él fue el artífice de la construcción de una mega cárcel con capacidad para 40.000 reos.
Las estadísticas avalan su política de lucha contra la criminalidad, pues muestran una drástica disminución del homicidio y un mejoramiento de la percepción de inseguridad en el país, mientras que organizaciones como Human Rights Watch han denunciado abusos y detenciones arbitrarias.
El régimen de excepción implementado por Bukele ha logrado detener 71.000 personas en 19 meses y la más reciente ley judicial que aprobó, permite que hasta 900 personas puedan ser procesadas en una misma audiencia, bajo el lema «el que nada debe, nada teme».
El oficialismo reconoció que 6.000 personas han sido detenidas injustamente bajo esa medida.
Fuente: Sistema Integrado de Información – RCN Radio – Juan Camilo Cely