Un brutal ataque en un apartamento de Jersey City, Nueva York, dejó una mujer y sus dos hijos muertos por apuñalamiento en lo que las autoridades investigan como un caso de violencia doméstica. El principal sospechoso, identificado como Napoleon Romero-Anduray, de 31 años, ha sido arrestado y enfrenta múltiples cargos de asesinato.
El crimen fue descubierto en la madrugada del jueves, cuando la policía respondió a un reporte en una vivienda ubicada en Hutton Street y Liberty Avenue. Al llegar, los agentes encontraron una ventana rota y, al ingresar al apartamento del sótano, hallaron a cuatro personas inconscientes, tres de ellas con heridas de arma blanca.
Entre las víctimas mortales se encontraba Luisa Urbano, de 31 años, quien fue declarada muerta en el lugar. Sus hijos, Juan Martín Urbano, de 9 años, y Diana Ramírez, de 5, fueron trasladados de urgencia al Centro Médico de Jersey City, donde lamentablemente fallecieron.
Las víctimas, naturales del departamento del Cauca, llevaban apenas dos años en el territorio norteamericano.
Romero-Anduray, quien también se encontraba en el apartamento con heridas, fue trasladado al hospital para recibir tratamiento bajo custodia policial.
Los investigadores han trabajado intensamente en la escena del crimen para recolectar evidencia que permita esclarecer lo sucedido. Un video de celular captó el momento en que más oficiales ingresaban al apartamento, mientras vecinos conmocionados relataban los hechos.
«Vi sangre en el suelo y vi cómo sacaban a una niña, casi inconsciente, del nivel inferior», declaró John Paredes, residente de Jersey City, para el medio local ABC7.
Otro vecino, Jay Perine, describió la tensión del momento: «Hubo algunos gritos porque supongo que fue entonces cuando se descubrió a los niños y a la madre».
El medio Univisión dijo que el presunto asesino era expareja de la víctima, pero no tenía relación con los niños, según testigos.
Cargos y antecedentes de violencia doméstica
Romero-Anduray enfrenta tres cargos de asesinato en primer grado, además de posesión de un arma con un propósito ilegal y posesión ilegal de un arma.
Algunos vecinos mencionaron que anteriormente se habían registrado problemas dentro del hogar. «Se puede escuchar mucho lo que pasa a través de las puertas. Las paredes son delgadas… pero para ser honesto, esto me sorprende», comentó Paul Bonilla, otro residente del área.
Para apoyar a los afectados, el gobierno local ha enviado capellanes y trabajadores sociales a la zona. La senadora estatal Angela McKnight lamentó la tragedia, señalando que la comunidad está «devastada por la pérdida de una mujer y dos niños pequeños en un acto de violencia doméstica sin sentido».
McKnight también instó a tomar medidas contra este tipo de crímenes: «No hay lugar para este tipo de brutalidad en nuestra sociedad, y seguiré siendo la voz de todos aquellos afectados por el abuso doméstico para que podamos poner fin a este círculo vicioso y doloroso».
Fuente: Sistema Integrado de Información – RCN Radio – Juan Camilo Cely