La organización separatista armada vasca ETA quiere desarmarse por completo de aquí al 8 de abril, anunció este viernes el gobierno regional vasco, que pidió la ayuda de las autoridades españolas y francesas en el proceso.
“El gobierno vasco otorga credibilidad a esta posibilidad de desarme final a corto plazo”, dijo el presidente regional, Íñigo Urkullu.
Ante este anuncio “de valor histórico para nuestra sociedad”, Urkullu pidió “altura de miras y canales de comunicación directos” a los gobiernos español y francés, que han exigido en repetidas ocasiones el desarme y disolución de la organización, considerada terrorista por la Unión Europea.
“ETA ha decidido, así lo ha dicho, desarmarse unilateralmente. Que lo haga, y de paso que se disuelva“, reaccionó el presidente del ejecutivo español, Mariano Rajoy. El dirigente puntualizó que, pese al sorpresivo anuncio, su gobierno hará “lo que ha hecho siempre, aplicar la ley igual para todos”.
En la misma línea, el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, avisó en su cuenta de Twitter de que la banda “no va a obtener nada a cambio” del desarme.
“La jornada de desarme de ETA tendrá lugar el 8 de abril”, dijo Txetx Etcheverry, militante de la organización vasca Bizi, quien hizo el anuncio inicial al diario francés Le Monde.
Según explicó por otro lado al diario vasco Gara, urgía dar este paso antes de las elecciones presidenciales y legislativas en Francia, de abril a junio, para no verse luego en “una situación que haga todavía mas difíciles estas cuestiones”.
“Por ello hemos tomado la decisión de que hay que cerrar este tema antes de las presidenciales”, dijo también y no dejar “que la situación se pudra todavía durante años”, apostilló.
Una fuente cercana al proceso confirmó toda la información señalando que de aquí a esa fecha, ETA dará pasos concretos, señalando la localización de sus escondites de armas.
“Hay una iniciativa concreta que tiene fecha para el 8 de abril”, y para entonces, el desarme “tiene que estar completado“, agregó esa fuente.
“Existe un plan concreto en fechas determinadas para que ETA deje de ser una organización armada”, abundó Arnaldo Otegi, líder del partido independentista vasco EH-Bildu, en el que militan ex miembros del aparato político de ETA.
“Esperamos que esta vez sí el proceso de desarme sea total“, y se efectúe con “la monitorización de la comunidad internacional“, añadió Otegi.
Los presos, cuestión pendiente
Urkullu puntualizó que su gobierno “ha estado directamente informado“, y expresó su deseo de “un desarme definitivo de ETA de carácter unilateral, irreversible, completo y legal”.
Hasta ahora, la organización se había negado a desarmarse y disolverse, aunque si hubo varios amagos en entregas de armas y exigía una negociación con París y Madrid sobre sus presos. En la actualidad quedan unos 350 en ambos países.
Los dos gobiernos se negaron a su vez a cualquier negociación, y han venido exigiendo con regularidad la disolución y desarme de la organización, fundada hace más de 50 años.
En los últimos meses, las fuerzas francesas y españolas desmantelaron varios escondites de armas.
El último hallazgo se produjo el 8 de marzo, cuando la Guardia Civil española anunció haber encontrado cerca de Irún, en el País Vasco, siete bidones de material explosivo.
El 12 de octubre de 2016 se encontró no lejos de París un importante depósito de armas con 145 armas de asalto. El entonces ministro español del Interior, Jorge Fernández Díaz, dijo que antes de ese decomiso la organización tenía entre dos y tres toneladas de explosivos, municiones y de 200 a 300 armas.
La banda armada renunció definitivamente a la violencia el 20 de octubre de 2011, después de cuatro décadas de lucha armada por la independencia del País Vasco, en las que se le imputa la muerte de 829 personas en atentados, así como numerosos secuestros y campañas de extorsión a empresarios.
El último atentado de Euskadi Ta Askatasuna (País Vasco y Libertad, en lengua vasca) tuvo lugar en 2010, y en él murió un policía en suelo francés.
Por: AFP