Rectores y profesores han venido advirtiendo sobre esta problemática que prende las alarmas ante el preocupante tema de drogadicción en la capital casanareña, especialmente en jóvenes menores de edad.
El consumo exagerado de sustancias alucinógenas, ya es preocupante en los colegios y sobre todo en menores de edad, en la última semana se han conocido fotos de jóvenes que a través de redes sociales, hacen alarde de esta situación. Llamo la atención la foto de dos jovencitas de Yopal, que no superan los 14 años de edad, donde exhiben su consumo con varias fotos, que horas después fueron eliminadas de su perfil.
El concejal de Yopal, Cristian Rodrigo Pérez manifestó su preocupación y dijo que a pesar de los programas de prevención que ha efectuado la administración los índices de consumo de drogas continúan en aumento.
«Se debe revisar la inversión destinada a la prevención del consumo de drogas, se percibe que no está funcionando, y debe estar acompañada de mano dura contra el micro tráfico de narcóticos. La estrategia debe ser integral, de informar a niños y adolescentes sobre sus consecuencias, de formar valores de integrar a padres de familia para evitar el consumo y para luchar contra los que quieren inducir a la población a consumir drogas», puntualizó la Cabildante.
Por su parte, Daniel Ferreira, profesional de la Secretaría de Educación y Cultura de Yopal, dijo que el mayor flagelo que tienen las Instituciones Educativas es la drogadicción, para lo cual se vienen fortaleciendo los planes y estrategias creadas en cada una de ellas, para mitigar el efecto y demás problemas que las rodean, y ayudar a mejorar el clima escolar y la sana convivencia entre niños, niñas y adolescentes.
La Secretaría de Educación de Yopal ha planteado organizar por lo menos dos (2) actividades que generarán un alto impacto en la población teniendo como protagonistas a los mismos estudiantes, mediante la realización de Concursos de Teatro, Pintura y Canto, alegóricos a la sana convivencia escolar.
Las principales causas del consumo son: la presión social por parte de compañeros, la falta de comunicación con los padres y la violencia en el núcleo familiar.