Un año después de su desaparición, la madre del niño Albertico Cardona espera por su regreso.
Un año ha transcurrido desde la desaparición en extrañas circunstancias del niño Alberto Cardona Sanguino, en inmediaciones de la vereda de Tigrera, jurisdicción rural del corregimiento de Minca, y hasta la fecha el paradero del menor sigue siendo un misterio.
Para la comunidad de Tigrera el caso de la desaparición, al parecer ya no hace parte de su mayor preocupación cotidiana. En efecto el paso del tiempo se ha encargado de borrar de la memoria colectiva la inesperada tragedia que marcó al caserío asentado en las estribaciones de la Sierra Nevada.
No obstante, los familiares y conocidos cercanos al entorno íntimo del niño, los verdaderos dolientes, son quienes realmente sufren por la ausencia del menor.
La madre del niño, Yuliana Sanguino, a pesar del dolor latente y la incertidumbre por el tiempo transcurrido, saca fuerzas para expresar brevemente que todavía guarda la esperanza de volver a tenerlo en sus brazos.
“Pienso en mi hijo todos los días, día y noche, en especial cuando cumplió 7 años el 30 de mayo, siempre me acuerdo de él, aunque en Tigrera nadie sabe nada y nadie dice nada; con mi familia y los niños estamos bien, pero es un año sin el hermanito, sin saber como está, si está bien o mal, no sabemos nada”, manifestó la mujer.
Las promesas y los recursos del Estado para apaciguar el sufrimiento nunca llegaron, por su parte el ICBF con frecuencia se comunica con la familia.
La señora Yuliana vive con sus pequeños hijos en una humilde vivienda de difícil acceso ubicada en el barrio Los Alpes de Santa Marta, desde donde mantiene contacto permanente con Tigrera.
“De la casa que me prometieron, no me han dicho más nada y la ayuda que me iban a dar, tampoco la hemos recibido, nadie me ha ayudado”, agregó.
Sin embargo, la resignada mujer, a pesar de la desilusión, solo hace caso a lo que en estos momentos le dicta la emoción. “Mi corazón de madre me dice que mi hijo está vivo”, puntualizó.
La desaparición del niño Alberto Cardona Sanguino, sucedió el 20 de septiembre de 2018, luego que no regresara de una caminata con su padre, quien cuatro días después fue hallado sin vida, lo que incrementó la incertidumbre sobre el estado del menor.
Para la prima de Albertico, Carolina Duque, las cosas no volvieron a ser las mismas, de repente la vida cambió para la familia y aceptar la realidad no es sencillo. “Esto no ha sido fácil, esto ha sido muy duro para un niño inocente”, afirmó.
Cuatro meses después del hecho, las labores de búsqueda del niño se suspendieron. Atrás quedaron las extenuantes jornadas de ubicación del menor en caseríos, trochas y caminos veredales, en un gigantesco operativo de los organismos del Estado que al final resultó en vano.
De nada sirvió la recompensa que en su momento se dispuso por parte de las autoridades, de $70 millones de pesos, a quien entregara información que permitiera la localización del niño.
Para conmemorar el día las autoridades de Minca anunciaron la celebración de una eucaristía que será presidida por el Párroco Ismael Torres en la capilla de Tigrera.