En caso de no disputarse el 26 de octubre, el partido sería difícil de jugar en otra fecha.
En medio de la tensión social que se vive en Cataluña, el partido que deberían disputar Barcelona y Real Madrid, el próximo 26 de octubre, podría ser aplazado. Sin embargo, las fechas de reprogramación de este partido serían complicadas, pues la cantidad de competencias que disputan estos equipos se traduce en un calendario con muy pocos espacios y las competencias locales, como la Copa del Rey, se transforman en un inconveniente pensando en su reprogramación.
En ese sentido, Javier Tebas, presidente de La Liga, aseguró que es difícil pensar en que el partido se juegue el próximo 18 de diciembre, pues ese día hay partidos de la mencionada Copa del Rey y, por ende, tocaría buscar otra fecha para la disputa del partido más atrativo, a nivel mundial, del fútbol español.
Por su parte, Ernesto Valverde, técnico del equipo azulgrana, afirmó que todavía quedan 9 días, por ese motivo supone que la situación se va a cambiar y que el partido debería jugarse, normalmente, en casa de Barcelona, situación que dependerá de la evolución de las protestas y manifestaciones que se han dado en Cataluña.
La decisión final respecto a la fecha será determinada por el Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol, sin embargo, teniendo en cuenta la declaración de Tebas y lo dicho por Valverde, en caso de suspenderse, el partido debería ser disputado el próximo 4 de diciembre en cancha del equipo blaugrana.
Por el momento, el Comité no ha tomado una decisión y, seguramente, está esperando para conocer el estado real de la situación, no asumir posturas de manera acelerada y así elegir de manera correcta, sin embargo, desde todas las partes hay presión y se espera un veredicto final, a más tardar, a inicios de la próxima semana.