Desde Caucasia donde revisa el problema de orden público en la región del Bajo Cauca antioqueño, Rafael Guarín, consejero presidencial para la Defensa y Seguridad Nacional, confirmó la presencia del grupo terrorista Hezbolá en Venezuela y los vínculos de ese país con el ELN, a propósito del atentado el año pasado a la Escuela General Santander en el que murieron 22 cadetes en Bogotá.
“Tenemos información de la presencia de Hezbolá en territorio venezolano, también en algunos países de América Latina, además el antecedente de esta organización terrorista con atentados en Argentina (…) Por esa razón, Hezbolá se le considera una amenaza para la paz y la seguridad internacional en América Latina y al estar incluido en la lista de la Unión Europea y en la lista de Estados Unidos de organizaciones terroristas, y buscando un enfoque para problemas comunes como el terrorismo en el marco de la OTAN y del acuerdo que tiene Colombia como socio global, se decidió incluirlo en la lista de 79 países que adoptó el consejo de seguridad de Colombia”, aseguró Marín.
En cuanto a la presencia de esta célula terrorista, el alto funcionario aseguró que se mantienen atentos a cualquier relación que puedan encontrar.
“Puede haber distintos niveles de relación, no solamente es la presencia de células sino también las actividades de financiación de Hezbolá y para eso al incluirlo en la lista, lo que se hace es dar una instrucción para que todas las capacidades del Estado colombiano se concentren en la detección que fija el ingreso, el tránsito y la permanencia de personas de este grupo como de los demás grupos terroristas que aparecen en la lista”, manifestó Marín.
Con referencia a un extenso artículo del exfiscal Néstor Humberto Martínez, que hablaba del ataque a la Escuela General Santander, explicando que lo que ocurrió fue un atentado suicida de un hombre que había propuesto en tres oportunidades inmolarse para afectar la caravana presidencial o el Palacio de Nariño o cualquier otra posibilidad y finalmente el ELN le dio el sí, y una posible relación con los movimientos que hace Hezbolá es a través de atentados suicidas, el consejero presidencial para la Defensa y Seguridad Nacional se mostró prudente y sostuvo que es mejor esperar a que termine las indagaciones y así conocer detalles por ser una situación delicada.
Por otro lado, tras confirmarse que quienes realizaron el atentado que dejó 22 muertos, se entrenaron en Venezuela, donde hay presencia de esta organización terrorista, Marín sostuvo que es evidente la presencia del ELN en territorio venezolano, “no solamente en áreas de frontera sino en franjas internas del país, por supuesto que hay una relación. De hecho, el carro salió desde Arauca, que termina siendo un corredor seguro del ELN”.
El funcionario del Gobierno nacional también se refirió a la decisión de sacar a las Farc de la lista de terroristas, aunque las disidencias de esa agrupación continúan activas, y afirmó que “al día de hoy, la Farc son un partido político legal con garantías constitucionales, por supuesto no podría incluirse como una organización terrorista, además una cosa son las disidencias de las Farc y una cosa muy distinta un partido político legal”.
“Que Estados Unidos mantenga a las Farc en la lista, es una decisión soberana, recuerde que el gobierno norteamericano no ha retirado las solicitudes de extradición de algunos miembros activos del partido Farc y que algunas de las personas que hacen parte de ese partido aún tienen cuentas pendientes con ese país, pero en eso el Gobierno de Colombia no puede ni debe intervenir”, agregó Marín.
En cuanto a la posibilidad de negociar con el ELN, Marín sostuvo que quienes entierran esa posibilidad de un dialogo de paz no son los 22 países que vinieron a la cumbre, sino los actos de la misma guerrilla. “Las condiciones del presidente Iván Duque han sido claras; abandonen todo el terrorismo y toda la actividad criminal, es sobre esa base que se puede avanzar hacia la paz.
Por último, Marín se refirió a las situación de orden público en distintas partes del país y aseguró que hay que separar los problemas que se presentan en materia de seguridad.
“Lo que se ratifica con absoluta claridad es que la presencia de grupos armados tiene relación con el control de la actividad del narcotráfico (…) Incluso, en Tumaco la Defensoría del Pueblo lo que indica es que son confrontaciones entre las estructuras anteriores por el control de los cultivos de coca. En el bajo cauca ayer visitamos el lugar donde se presentó el homicidio de cinco personas, una vereda y lo que está claro es que es una confrontación entre el Clan del Golfo y Los Caparros. Es decir, que aquí lo que tenemos en las zonas rurales es un escenario de confrontación producto de haber permitido que aumentaran los cultivos ilícitos, esa es la realidad del país y eso no se resuelve de la noche a la mañana, se ha venido avanzando, pero tenemos una tarea larga por hacer”, explicó Marín.
En el caso de las ciudades el panorama es distinto, según Marín, “en Bogotá hubo una reducción sustancial en los homicidios, pero aumentó el número de robos”.