La leyenda del fútbol Pelé sufre de «cierta depresión» y «no quiere salir» de su casa debido a sus dificultades para caminar, afirmó su hijo Edinho a la prensa brasileña.
«Está bastante frágil en relación a su movilidad. Se hizo un trasplante de cadera y no hizo una rehabilitación adecuada, ideal. Entonces, está con ese problema de movilidad, que termina acarreando una cierta depresión», afirmó Edson ‘Edinho’ Cholbi do Nascimento en una entrevista con el sitio GloboEsporte publicada este lunes.
El triple campeón del mundo (1958, 1962, 1970), de 79 años, utiliza un andador para desplazarse y por eso «siente vergüenza, no quiere salir, exponerse, estar en la calle, no quiere hacer prácticamente nada que implique salir de casa. Está muy retraído, recluido», añadió Edinho.
En los últimos años Pelé ha ingresado varias veces al hospital debido a problemas de salud y ha llegado a mostrarse en público en silla de ruedas.
«Imagina, es el Rey, siempre fue una figura tan imponente y hoy ya no puede caminar normalmente», prosiguió el hijo del legendario futbolista, que en 2012 se colocó una prótesis de cadera y desde entonces se desplaza con cierta dificultad.
Pero, fuera de sus problemas para caminar y las consecuencias que eso trae para su ánimo, su padre «está bien», afirmó Edinho.
La última vez que Pelé ingresó al hospital fue en abril de 2019, cuando fue internado en París y trasladado a Sao Paulo para retirarle un cálculo renal.
En 2014 ‘O Rei’ estuvo internado en cuidados intensivos tras otra infección urinaria que le obligó a someterse a diálisis en su riñón izquierdo, el único que le queda desde que en los años 70 le fue extirpado el derecho, debido a una lesión cuando aún era jugador.
Edinho, de 49 años, fue arquero del Santos -equipo en el que brilló su padre- y estuvo preso tras ser condenado por tráfico de drogas y lavado de dinero.