La vicepresidenta Marta Lucía Ramírez emitió un comunicado a través del cual aclaró las afirmaciones que hizo sobre carreras como la psicología y la sociología.
Según la alta funcionaria del Gobierno, las mujeres también deberían concentrarse en estudiar ciencias más asociadas a la cuarta revolución industrial, razón por la cual recibió fuertes críticas.
Ante esto, Ramírez indicó que jamás quiso descalificar ninguna profesión, como muchos lo quisieron afirmar.
“Nunca ha sido ni será nuestra posición la de descalificar alguna profesión. Cada oficio y cada profesión cumple un papel indispensable en nuestra sociedad”, indicó la vicepresidenta.
“No podemos caer en la trampa de quienes quieren sembrar la discordia y distraer la atención en estos temas de alta importancia, como lo son la educación y el futuro laboral de nuestras niñas para que tengan mañana mayor autonomía económica. Hoy la demanda de profesionales, desafortunadamente es inferior a la oferta que todos los años producen las universidades en carreras tradicionales”, añadió.
Dijo además la programación, los algoritmos, la inteligencia artificial y la biotecnología, también son campos que deben ser tenidos en cuenta por las mujeres a la hora de estudiar.
“Entre más información tengan nuestras niñas sobre las nuevas profesiones, más libres serán al escoger profesiones que combinen la vocación, con la aspiración de lograr un mejor desarrollo de carrera y remuneración”, manifestó.
Indicó que la demanda de profesionales en estos campos es creciente y con “muy buena remuneración”, pero eso no impide reconocer el indispensable trabajo que hacen los psicólogos en el tratamiento de casos como el stress, la ansiedad y la depresión.
“Es urgente acabar los estereotipos de que las mujeres no tenemos las mismas capacidades para un pensamiento lógico, abstracto y matemático que los hombres (…) Preocuparnos por la empleabilidad y el ingreso de las mujeres, no supone denigrar de ninguna profesión en particular, ni de quienes la ejercen”, enfatizó la vicepresidenta.
Sin embargo, la alta funcionario aceptó los cuestionamientos y recomendaciones que hicieron tanto el Colegio Colombiano de Psicólogos (Colpsic) y las facultades de Psicología y Sociología de las universidades.