El Ministerio de Salud reveló el manejo, traslado y disposición final que debe tenerse en cuenta con las personas muertas por Covid-19. De cuerdo a la entidad, se debe realizar en el menor tiempo posible con el fin prevenir la exposición de los trabajadores y la comunidad general al virus.
Entre las disposiciones que deberán adoptar desde el sector funerario también se estableció que el transporte, la cremación o inhumación, según sea el caso, deberá realizar bajo estrictas medidas de bioseguridad, para garantizar las condiciones de trabajo y de operación.
“Las orientaciones reconocen una serie de medidas generales y especificas desde el momento de la muerte hasta la disposición final del cadáver, con el fin de disminuir el riesgo de tras misión de la Covid-19. Estas se encuentran dirigidas a las entidades y al personal responsable y competente”, explicó Adriana Estrada, subdirectora de Salud Ambiental del Minsalud.
El Ministerio señaló además que la disposición final del cadáver será preferiblemente mediante cremación y solo en el caso en el que no se cuente con instalaciones para este procedimiento, se practicará la inhumación en sepultura o bóveda.
Y advierte que en la eventualidad de que el deceso por Covid-19 ocurra en la vivienda, «lo primero a realizar es la notificación a la Secretaría de Salud, para que esta realice la coordinación con la EPS respectiva y se efectúe el proceso de certificación del cadáver, toma de muestras, alistamiento y posteriormente entrega al servicio funerario».
En el caso de las velaciones, despedidas o ceremonias religiosas para fallecidos por Covid-19, el Ministerio de Salud señala que se deben evitar aquellos rituales fúnebres que conlleven reuniones o aglomeraciones de personas.
«Esto teniendo en cuenta que el transporte, la cremación o inhumación se deben realizar en el menor tiempo posible y cumpliendo las medidas de bioseguridad y las orientaciones que establezcan el personal de salud y las administraciones de los cementerios».
Sin embargo, el Ministerio de Salud señaló que las medidas están en constante revisión de acuerdo a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, experiencias exitosas internacionales e inquietudes que han expresado los diferentes actores en este proceso.
Estrada indicó que estas disposiciones “son importantes para garantizar la disminución de eventos adversos o situaciones de riesgo en el personal que trabaja en los centros de salud, sector salud, funerarios, autoridades policiales, judiciales, familia y comunidad en general” y que buscan la prevención de nuevos casos, ya que se trata de un virus de una alta transmisibilidad.