La firma de biotecnología estadounidense Moderna anunció este lunes que tuvo resultados «positivos provisionales» en la fase inicial de los ensayos clínicos de su vacuna contra el coronavirus hechos con ocho voluntarios, que será ampliado a gran escala en julio.
El compuesto produjo una respuesta inmune en los ocho pacientes que la recibieron, de la misma magnitud de aquellos que se han contagiado con el virus, dijo la compañía.
«La fase provisional 1, aunque es un estadio temprano, demuestra que la vacunación con mRNA-1273 produce una respuesta inmune de la misma magnitud que la provocada por la infección natural«, dijo en un comunicado el doctor Tal Zaks, director médico de Moderna. En ese sentido, la compañía afirmó que la vacuna «tiene el potencial para prevenir la COVID-19».
Esta primera fase buscaba también verificar que la vacuna no es tóxica y Moderna sólo reportó algunos efectos secundarios leves como un enrojecimiento de la zona de la inyección.
La estadounidense Moderna fue una de las primeras empresas en inyectar pruebas a humanos, comenzando el pasado 16 de marzo. Actualmente hay sólo 12 ensayos clínicos con humanos en el mundo, la mitad de los cuales son proyectos chinos, según el conteo de la Escuela de Medicina y de Higiene de Londres.
Estos resultados preliminares impulsaron a Wall Street que abrió al alza este lunes, rompiendo con la tendencia en baja de la semana pasada.
El estudio clínico fue llevado a cabo por el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de Estados Unidos (NIAID), donde el gobierno invirtió 483 millones de dólares para esta potencial vacuna.
El gobierno de Donald Trump, en su búsqueda de 300 millones de dosis de aquí a enero para proteger a su población, invirtió en este proyecto y en dos más: el de la farmacéutica estadounidense Johnson & Johnson y el del laboratorio francés Sanofi, que tiene centros en Estados Unidos.
El procedimiento para fabricar esta vacuna, una tecnología conocida como RNA messager, no ha producido hasta ahora ninguna vacuna viable.
La segunda fase con 600 voluntarios comenzará a partir de junio, informó el presidente de Moderna, Stephen Hoge, y la etapa más importante, la fase 3, está prevista para julio, mientras la agencia que regula los medicamentos en Estados Unidos, la FDA, finaliza el protocolo.
En el ensayo de Moderna, en la primera fase, tres grupos de voluntarios recibieron tres dosis diferentes y con un refuerzo pasados 28 días.
Según los primeros resultados, los científicos decidieron eliminar las dosis más fuertes después de las pruebas, ya que con menos cantidad se obtienen resultados.
La empresa anunció recientemente una asociación con el gigante Lonza para aumentar su capacidad de producción y poder fabricar hasta 1.000 millones en un año, si se confirma que la dosis más baja es efectiva.
Las primeras pruebas realizadas en ratas mostraron que la vacuna impedía que el virus se replicara en los pulmones, indicó la empresa el lunes.