8.000 cápsulas fueron arrojadas desde el helicóptero Black Hawk de la Fuerza Aérea con alrededor de 22.000 semillas de árboles nativos de la región, como Algarrobo, Yopo, Yopa, Samán, Guácimo, Cedro Rosado y Copaiba. Las esferas fueron fabricadas en papel mojado con abono y agua, las cuales fueron rellenadas de semillas y posteriormente puestas al sol, durante tres días, logrando una consistencia firme.
Este novedoso sistema es un proyecto que está enmarcado en la Operación Mayor Artemisa, que consiste en restaurar las áreas deforestadas de la Orinoquía colombiana, que según boletines expedidos por el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales y el IDEAM, la Orinoquía es una de las regiones más afectadas del país por la tala indiscriminada de bosques.
Por tal razón, es necesario seguir fortaleciendo estrategias en la búsqueda de repoblar las áreas más damnificadas, es así como la meta de la Lluvia Verde es lograr el 75% de efectividad, es decir, que germinen al menos 16.500 semillas del total lanzado en las más de 10 hectáreas de terreno, que previamente fue identificado y validado por la Corporación Autónoma Regional de la Orinoquia, teniendo en cuenta la necesidad de reforestar el humedal y las dificultades para sembrar de manera tradicional.
Las diferentes entidades regionales continuarán articulando sus capacidades con el fin de reverdecer el entorno, proteger y preservar el medio ambiente, con iniciativas innovadoras en pro del cuidado del ecosistema, llegando siempre a cada rincón del territorio colombiano.