La vicepresidenta de la República, Marta Lucía Ramírez manifestó la necesidad de fortalecer las medidas de fondo para evitar que se presenten nuevos casos de abusos y acosos sexuales protagonizados por agentes de la Fuerza Pública en contra de mujeres, niños, niñas y adolescentes.
En una reunión sostenida el pasado viernes con el Ministro de Defensa y toda la cúpula militar, Ramírez indicó que se deben modificar los procesos de admisión y realizar continuamente las pruebas psicológicas con el fin de detectar a tiempo, desde los soldados profesionales, conductas violentas, misóginas y de discriminación para tomar acciones drásticas y evitar que ese comportamiento afecte la convicencia de los integrantes de al Fuerza Pública con la comunidad.
«Se tomen correctivos urgentes como el énfasis en hacer pruebas psicológicas que permitan identificar oportunamente cualquier rasgo misógino o violento en esos jóvenes y por supuesto cualquier actitud de discriminación, violencia, odio, o riesgo de caso en contra de las mujeres», señaló Ramírez en una carta a los comandantes militares.
Reconoce que el servicio militar es, en muchos casos, la única oportunidad que tienen los jóvenes en varias regiones del país, por lo que lo hacen como una obligación y no por vocación. Ramírez recordó que siendo Ministra de Defensa presentó un proyecto de ley para que fuera obligatorioun «servicio social» tanto en hombres y mujeres para defender la democracia.
«(…) en ese proyecto incluí la necesidad de contar con un servicio social obligatorio tanto para hombres como para mujeres de nuestro país para lograr así que la defensa de las insituciones, el trabajo en los territorios y la construcción social no esté a cargo de unos pocos», recordó la Vicepresidenta al señalar la necesidad de revisar los alcances de esta propuesta al ministro Carlos Holmes Trujillo.
Considera que se debe revisar, por el momento, la incorporación que se exige a los comandantes de las respectivas zonas de recluramiento. «Se mejor que nadie los inmensos desafíos que enfrentan nuestras Fuerzas Militares, pero definitivamente es mejor calidad que cantidad y si la necesidad de incorporación es mayor, debe curbriese con todos los estratos de la sociedad colombian».
La vinculación de la mujer
En otra de las conclusiones de la reunión celebrada el pasado viernes, y la cual quedó consignada en un comunicado de prensa, la Vicepresidentaseñaló que es necesario «estimular» la vinculación de más mujeres a la Fuerza Pública.
«(…) dicha mesa tendrá como objetivo estimular el desarrollo de las mujeres militares y de policía, promover la vinculación de más mujeres a la fuerza pública y contribuir a su desarrollo para que la sociedad colombiana se beneficie de su liderazgo y excelencia y reciba su aporte para tender mejores puentes de convivencia y armonía en la sociedad colombiana, así como el continuo fortalecimiento institucional de la fuerza pública», indicó.
Para Ramírez, es clave aprovechar su conocimiento y preparación para crear estrategias destinadas a la capacitación y pedagogía en todas las unidades militares sobre «el respeto a las mujeres, sus derechos, su integridad física, psicológica y sexual», así como emitir cursos en los que se expliquen las consecuencias penales y disciplinarias que existen en contra de los miembros de la Fuerza Pública que incurran en cualquier agresión contra mujeres, niños y adolescentes.
«(…) El reconocimiento a las capacidades y aporte de als mujeres en los distintos ámbitos; la mayor valoración sobre el rol de las mujeres que integran nuestra sociedad y sus instituciones y el compromiso de todas elas, por lograr que sus capacidades y méritos le generen no slo reconocimiento y promoción al interior de esas fuerzas, sino las motiven a ejercer su liderazgo en beneficio de la protección y la proyección de todas las mujeres que integran nuestra Nación».