El nombre de Mia Khalifa es famoso a nivel mundial, gracias a un corto paso por la industria porno, sin embargo, pocos conocen su historia y el por qué aún carga con el peso de ser famosa, pese a todos los intentos de que sus videos para adultos sean eliminados de internet.
Con 27 años, la mujer oriunda de Beirut (Líbano) es una figura púbica que cuenta con más de 21 seguidores en su cuenta oficial de Instagram, pero su reconocimiento mundial llegó cuando apenas tenía 21 años y por accidente.
La joven contó al programa Hard Talk de la BBC, que durante varios años luchó contra el sobrepeso y eso la hizo sentir como una mujer fea, que no merecía la atención de los hombres.
Todo esto cambio cuando entró a la Universidad de Texas, perdió algo de peso y el aspecto de la chica ingenua cambió tras una cirugía estética en sus senos.
La joven recibía una atención a la que nunca había estado acostumbrada, pero confesó que su camino en la industria pornográfica no comenzó con alguien guapo que la convenció de grabar videos. Alguien le dijo que “era muy bella” y que si quería modelar, aunque nunca mencionaron las escenas para adultos.
Su primera escena de cine para adultos aún es una de las más vistas en la actualidad, Mia aceptó la invitación de los productores de Bang Bros y según el Washington Post, «el equipo de filmación se reunió en el Airbnb para filmar la escena con Khalifa en un hijab en la cabeza».
El momento la llevó a la fama, pero también le trajo una serie de amenazas de simpatizantes del Estado Islámico y el rechazo de su propia familia.
Solo trabajó durante tres meses en la industria pornográfica, en los que grabó, según sus cuentas, once videos para adultos por los que recibió solo 12.000 dólares y nunca un peso más, aunque en la actualidad sus videos que se siguen reproduciendo.
Fuente: Sistema Integrado Digital