No existe preocupación en el seno del Barcelona por el estado físico de Leo Messi, que sufrió una fuerte contusión por parte de Kalidou Koulibaly, central del Nápoles, y después de ser examinado este domingo en la Ciudad Deportiva todo apunta a que estará disponible para los cuartos de final de la Champions ante el Bayern de Múnich en Lisboa (viernes 14).
Messi recibió un fuerte golpe de Koulibaly en el tobillo izquierdo, en una jugada que significó el penalti que generó el 3-0 de los azulgrana ante el Nápoles. El equipo azulgrana se entrenó este domingo en una sesión de recuperación y no volverá a entrenarse hasta el próximo martes. El jueves 13 de agosto, por la mañana, es el día que el equipo viajará a Lisboa.
Los azulgrana se instalarán cerca de la plaza del Marqués de Pombal, a pocos kilómetros de distancia tanto del estadio Da Luz (escenario del partido ante el Bayern) como del estadio José Alvalade, donde jugaría una hipotética semifinal. Cada uno de los ocho equipos que participaran en la fase final de la Champions quedarán instalados en un hotel diferente. Los barcelonistas se entrenarán el mismo jueves en el estadio Da Luz.
Lo hecho por Messi en el Camp Nou fue fundamental para darle la victoria al elenco blaugrana frente a los italianos, quienes arrancaron el partido con más ganas, pero se fueron quedando con el paso de los minutos. El jugador rosarino anotó el segundo tanto del triunfo y se le anuló el que podía ser su doblete, luego de una cuestionada mano en el área que definió con mestría sobre el arquero colombiano, David Ospina.