Los hechos ocurrieron en Australia, donde una pareja de papás fue condenada por causarle daños irreparables a una pequeña que nació en el año 2017, todo por alimentarla con una dieta vegana desde los 4 meses.
Según las pruebas presentadas al a justicia australiana, los padres comenzaron a darle leche de coco a su hija cuando tenía cuatro meses de nacida, en vez de leche materna o fórmula.
Ante la falta de suplementos primordiales para los primeros meses de vida, la salud de la bebé comenzó a deteriorarse, así que en agosto del 2018 la tuvieron que llevar a urgencias.
La pequeña duró un mes en cuidados intensivos, por lo que los servicios sociales comenzaron una investigación para determinar si hubo maltrato o abuso hacia la pequeña.
Después de varios meses de investigación, concluyeron que la menor había sido sometida a una rigurosa dieta vegana y además de que presentaba un nivel de desnutrición similar a la de los niños en los países afectados por el hambre, tenía problemas cognitivos.
El caso llegó hasta los estrados judiciales y los padres fueron condenados a 12 meses de trabajo comunitario y según el juez del caso citado por el portal local The Age, “no fueron a la cárcel solo porque dejar a la pequeña sin padres, sería un castigo para la menor”.
La niña ya tiene 3 años enfrentará luchas diarias en su desarrollo cognitivo, funcionamiento físico y comunicación, todo por una convicción de sus padres.