Una joven australiana fue declarada culpable de homicidio tras darle 100 puñaladas a su madre y luego decapitarla dentro de su casa.
Los medios locales de Sydney, reseñaron que la mujer identificada como Jessica Camilleri, de 27 años, atacó a su progenitora luego de tener una fuerte discusión.
Durante el juicio de siete días, que concluyó el jueves, un tribunal escuchó detalles inquietantes de cómo Camilleri apuñaló a su madre, Rita, en el cuello y la cabeza, antes de sacarle los globos oculares, cortarle la lengua y la nariz.
Las autoridades aseguraron que durante sus declaraciones Jessica relató que luego de cortar la cabeza de su madre trató de mostrársela a un vecino como prueba de su crimen, pero se le resbaló de las manos y cayó en la calle. También le habría dicho a un psiquiatra que sus horribles acciones estaban inspiradas en películas violentas.
La hermana menor de Camilleri, Kristy Torrisi, confirmó en la corte que a ella le gustaba ver películas que involucraban asesinatos o desmembramientos y que “se detenían y retrocedían en ciertas partes”.
Tras ser detenida, la joven le habría preguntado a la policía si era posible coserle la cabeza a su madre. “¿Puedo preguntar, mi mamá está muerta? ¿No creas que estoy loca, pero no puedes devolverla a la vida?”, son algunas de las tantas inquietudes que tenía Jessica cuando llegó a la comisaría.
El fiscal Tony McCarthy, reveló que la señalada sufrió dificultades de comportamiento y aprendizaje, incluido el TDAH (Trastorno por déficit de atención con hiperactividad) desde la infancia. Además, hace unos años diagnosticaron un trastorno de ira y se encontró que estaba en el espectro del autismo, y el pasado agredió tanto a extraños como a familiares.