El fiscal general de la Nación, Francisco Barbosa, aseguró que avanzan por muy buen camino las investigaciones tras la masacre de cinco jóvenes en una finca de Buga (Valle del Cauca), el pasado fin de semana.
En medio de su visita a la ciudad de Pereira, el funcionario señaló que los expertos de esa entidad que están al frente del caso, recolectaron importantes elementos probatorios, mientras agregó que se realizaron pruebas técnicas que permitieron conocer detalles de los homicidios.
En ese sentido, el fiscal general señaló que en los próximos días no se hablará de las posibles hipótesis, sino de resultados concretos que permitan capturar a los responsables.
“Hemos recaudado elementos materiales probatorios, evidencia física que se encuentra en análisis de nuestros laboratorios forenses y ya tenemos elementos muy importantes dentro de esta investigación. Hay prueba técnica que nos ha permitido entender qué ocurrió en estos hechos. Yo no hablo de hipótesis, en unos días hablamos de los resultados de esta investigación”, aseguró.
Entre tanto, las autoridades aumentaron a $250 millones la recompensa por información que permita identificar a los responsables de la masacre.
Entre tanto, se conoció que uno de los dos sobrevivientes de estos hechos ya fue dado de alta y podría ayudar en las labores de identificación de quienes perpetraron estos crímenes.
Las autoridades tienen elementos materiales probatorios como un maletín, un celular y tres armas de fuego, además de los testimonios de las personas que también estaban en la finca.
Las víctimas
Los jóvenes víctimas de la masacre fueron identificados como Sara García, estudiante de Zootecnia; Juan Pablo Marín, próximo a iniciar estudios de Derecho en Medellín; Jacobo Pérez practicaba hockey y hace poco había llegado de Canadá; Nicolás Suárez, quien era deportista y Valentina Arias, quien recientemente se había graduado del colegio.