Los funcionarios y animalistas de un zoológico en Michigan, EE.UU. se encuentran completamente sorprendidos tras un suceso lamentable en el que murió una hembra de oso polar en un intento de apareamiento.
Los hechos ocurrieron esta semana en el zoo de Detroit donde un macho de 16 años, llamado Nuka, agredió hasta la muerte a la hembra Anana, una osa polar de 20 años, con que pretendía aparearse.
Según el relato conocido, los animales llevaban unos meses separados y fueron puestos en la misma jaula para el proceso de apareamiento con el que se busca aumentar esta especie. Sin embargo, el resultado fue trágico, costando la pérdida de la hembra.
Esta pareja de osos polares hacía parte de un programa especial de repoblamiento controlado, en la que participan varios zoológicos estadounidenses para salvar esta especie en vía de extinción.
Anana había llegado hace poco al zoológico, prestada por Cincinnati y compartió junto a Nuka durante cerca de un año en la misma jaula. Durante la convivencia los cuidadores nunca observaron actitudes que pusieran en peligro a ninguno de los dos animales.
Meses antes de la época de apareamiento, la pareja de osos fue separada hasta los primeros días de febrero cuando volvieron a dejarlos juntos.
Frente al incidente, Scott Carter, funcionario de la Detroit Zoological Society, explicó que fue algo «completamente inesperado y el staff del zoológico de Detroit está devastado por la pérdida de Anana«.
Los cuidadores también reportaron que durante los 10 años que lleva Nuka en el zoo, nunca había mostrado comportamientos peligrosos hacia las hembras de su especie.