El actual alcalde de Pajarito, Inocencio Pérez Castro, informó que el transporte público entre Boyacá y Casanare ha disminuido en un 80 por ciento debido al paro armado del Ejército de Liberación Nacional ELN. Aunque sigue habiendo tránsito, no se manifiesta el mismo flujo de vehículos que en situaciones de normalidad, agregó.
“Por ejemplo, no estamos viendo tanto bus grande, sino más bien busetas pequeñas”, expresó el Mandatario, al reconocer que Pajarito está siendo víctima del miedo, pues las personas temen salir o viajar ante la posibilidad de cualquier represalia por parte del grupo armado, puesto que han ubicado pancartas y banderas del ELN en los límites con Casanare, en la quebrada Costa Grande y en el Alto de Boquerón.
En adición a esto, el alcalde aseguró que no se han registrado alteraciones de orden público y resaltó que se mantienen controles de seguridad de la fuerza pública en la vía. Sin embargo, la situación es crítica para algunos vendedores del municipio, quienes obtienen su sustento económico a partir de sus ventas en los buses.
Pérez Castró concluyó diciendo que en la noche del martes la vía estuvo cerrado por aproximadamente una hora, luego que individuos que se identificaron como miembros del ELN atravesaran un vehículo y colocaran banderas de ese grupo terrorista.
