El gobierno de Jair Bolsonaro afirmó la noche del lunes que todavía no está confirmada la realización de la Copa América en Brasil, horas después de que la Conmebol lo anunciara como sede en sustitución de Argentina, y dijo que este martes tendrá «una posición final».
«Todavía no hay nada cerrado, quiero dejar esto de forma bien clara. Estamos en medio del proceso. Pero no vamos a rehuir la demanda, en caso de que sea posible de atender», declaró el ministro de la Casa Civil (gabinete), Luiz Eduardo Ramos, en Brasilia.
Ramos explicó que el gobierno brasileño ha puesto varias condiciones a la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) para la realización del torneo, como que no haya público y que todas los miembros de las delegaciones sean vacunados.
«Ese evento, en caso de que se realice, no tendrá público. Por ahora son 10 equipos, en dos grupos, habrá 65 personas por delegación, todos vacunados. Las sedes serán responsabilidad de la CBF. De acuerdo con la elección de las sedes, ellos consultarán con los estados», declaró el ministro.
«Mañana (martes) tendremos una posición final», declaró el ministro.
La Conmebol le sacó la sede el domingo a Argentina, donde recrudeció la pandemia de covid-19, y diez días antes hizo lo mismo con Colombia a raíz del estallido social en ese país que deja decenas de muertos.
Y este lunes por la mañana anunció que sería Brasil y le agradeció al presidente Jair Bolsonaro por abrir las puertas al torneo, que se disputa del 13 de junio al 10 de julio.
El anuncio desató una oleada de criticas en el país, el segundo del mundo con más muertos por coronavirus (462.000) y que teme la llegada de una tercera ola en las próximas semanas.