Vladimir Cañizales y Rubén Sandoval habitantes de la vereda Rosa Blanca de Hato Corozal, dieron cuenta de las obras construidas, con las cuales creen que se evitará que el río Chire, continúe saliéndose de su cauce hacia una cañada, la cual les generaba todo tipo de afectaciones.
De acuerdo con Guillermo Pérez director de la Gestión del Riesgo en Casanare, las obras construidas metros abajo del puente sobre la Marginal del Llano, consisten en una canalización y construcción de un jarillón de 300 metros en la margen izquierda de la vertiente.
“Era lo que nosotros estábamos esperando. Porque el río se iba por esa cañada y acababa con cultivos, pastos y hasta ponía en riesgo la tubería del gas”, puntualizó Vladimir.
Mientras que Sandoval, señaló: “esta es una ayuda muy grande para todos nosotros, porque nos quita la preocupación de que el río se encauce y siga haciendo daños”.