Dos semanas después del asesinato del presidente de Haití, Jovenel Moise, continúa la investigación con preguntas por resolver y muchos cabos sueltos, como los supuestos vínculos de altos funcionarios del Ejecutivo con el magnicidio.
Edwin Paraison, director ejecutivo de la Fundación Zile y exembajador de Haití en República Dominicana, aseguró en RCN Radio que la situación es confusa, «hay largos cabos sueltos, zonas grises, que no nos permiten entender aun la motivación de quienes presentan como autores intelectuales».
Para el exdiplomático, los señalados como autores intelectuales, incluyendo el médico Emmanuel Sanon, «son personas que tampoco tienen una gran incidencia política en Haití», sin embargo, se mantiene respetuoso de la versión de las autoridades de su país, que dicen que en el magnicidio «no han participado dirigentes conocidos o figuras claves de la clase política haitiana. Pero también esta claro que sectores adversos al asesinado presidente, como el empresariado, tampoco han estado hasta ahora implicados», dijo Paraison.
En estas dos semanas, generó indignación en el Gobierno del país caribeño, que medios de comunicación en Colombia vincularan directamente al ex primer ministro Claude Joseph con el magnicidio, una afirmación por la cual la misma embajada de Haití en Colombia pidió rectificación y disculpas públicas.
Tal como dicen las autoridades haitianas, Edwin Paraison afirma que «no hay elementos que vinculen directamente a Joseph con un intento de golpe de estado», a pesar de que desde febrero de este año, Jovenel Moise era considerado por muchos como un usurpador del poder, y por lo que el mismo Moise denunció un intento de golpe de sus adversarios.
Paraison sí cree que tanto Joseph como todas las autoridades estatales debieron renunciar por fallar en la protección del Presidente.
«Se entiende que esas autoridades que estaban con responsabilidades estatales en el momento del asesinato, fallaron al punto que se permitió que un comando llegará hasta el aposento del Presidente, y tienen una responsabilidad que, aunque no los vincula con el hecho de sangre directo, sí por ineficacia, por faltas profesionales y debieron renunciar».
Se refiere el ex-diplomático al Jefe de la Policía Nacional y al primer ministro saliente, que era Claude Joseph en el momento, y ellos «debieron ponerse a disposición de los investigadores».
Mientras avanzan las investigaciones, está previsto que este jueves se celebre la misa en honor a Moise en la catedral de Cap-Haitien, la ciudad más importante del norte del país.
Un día después se realizará el funeral del mandatario y su cuerpo será enterrado en el panteón familiar, en esa misma ciudad, ubicada a pocos kilómetros de Trou-du-Nord, la localidad natal de Moise.
Aunque las celebraciones tengan carácter de Estado, la familia de Moise anunció que costeará todos los gastos, según el deseo de la primera dama.