En plena celda de Washington, Estados Unidos, el hermano de una mujer abusada coincidió con el violador, a quien luego asesinó.
El presunto asesino afirma que el sujeto le relataba, con detalles, de abusos contra mujeres que él no estaba dispuesto a escuchar.
Justicia por mano propia
Shane Goldsby, joven de 26 años, fue enviado a prisión tras haber robado una patrulla y herir a un policía en medio de la persecución.
Durante su estadía en la prisión y por azares de la vida, terminó siendo compañero de celda de Robert Munger, un hombre de 70 años que estaba cumpliendo una condena por delitos de violación, abuso sexual infantil y posesión de pornografía con menores.
El destino los juntó
El hermano de la abusada ingresó al centro penitenciario en el 2017. Sin embargo y pese a saber que Munger había violado a su hermana, aseguró que no buscaba venganza.
Goldsby, luego de dos años encerrado, había conocido a Dios y la ley del ojo por ojo no se encontraba entre sus planes.
La venganza lo consumió
La paciencia del joven terminó cuando el pedófilo comenzó a contarle de sus atroces crímenes sexuales y, a partir de entonces, el hombre se llenó de ira y terminó matando al violador de su hermana.
El diario estadounidense, Washington Post cuenta que Shane Goldsby, llegó a un punto en que describía detalladamente el contenido pornográfico que el señor poseía. Este fue el motivo por el cual el joven se salió de casillas y le propinó una golpiza que envió a Robert Munger directo al hospital.
Finalmente, el pedófilo murió luego de estar tres días en condiciones críticas.
Por su parte, el joven ofreció disculpas por su accionar en contra del violador de su hermana, “me avergüenzo de mis acciones, me pusieron en una situación que no desearía a nadie”.