El mundo entero está en vilo con la toma de Kabul por parte de los talibanes y el riesgo a la violación de los derechos de las mujeres y niñas en el territorio. El fin de semana la atención del mundo se centró en la toma de la capital de Afganistán por parte de los talibanes y el anunció de la retirada de las tropas estadounidenses del territorio afgano.
Por otra parte, el presidente Ashraf Ghani abandonó el país este domingo tras el repliegue del grupo armado en la capital, asegurando que esta decisión era para evitar un ‘derramamiento de sangre’.
Tras días de escenas llenas de miedo e incertidumbre, los talibanes lanzaron un mensaje reconciliador y unidad, indicando que respetarán los derechos de las mujeres y también la libertad de prensa. Sin embargo, ciento de mujeres están preocupados por lo que pueda suceder.
Las mujeres en Afganistán
El rol de la mujer en el territorio Afgano ha cambiado en los últimos 20 años. Los derechos de las mujeres en este país han variado de cuerdo a lo que disponga el gobierno de turno, ganando y perdiendo sus derechos a voluntad.
La historia de las mujeres en Afganistán no ha sido fácil. Antes 1979 las mujeres tenían derechos y libertades: en 1919 lograron el derecho al voto, en los años 50 se abolió la purdah (separación por sexos) y en los años 60 se estableció una nueva Constitución donde habían avances en términos de igualdad.
Sin embargo esto cambio en los años 80, cuando todo lo que habían avanzado dio un retroceso. La ocupación soviética y los conflictos armados entre muyahidies y el gobierno fueron el punto de quiebre y no fue hasta que los talibanes tomaron el control, cuando las mujeres perdieron todos los derechos que ya habían alcanzado.
Entre 1996 y 2001, cuando ejercieron el poder, los talibanes impusieron una visión rigurosa de la ley islámica. Las mujeres no podía ni trabajar ni estudiar, eran solo vistas para la procreación. Para la misma época, las violaciones y la violencia contra la mujer se convirtió en algo cotidiano, así lo reportó Amnistía Internacional.
En esta ocasión, los talibanes han anunciado que respetarán los derechos de la mujer, pero con una visión islámica. «Nos comprometemos a dejar trabajar a las mujeres de acuerdo con el respeto de los principios del islam«, manifestó Zabihullah Mujahid.
No obstante las mujeres afganas están temiendo lo peor para ellas, según relata la corresponsal de The Guardian, Emma Graham-Harrison, al paso de los talibanes por diferentes lugares del territorio afgano en las últimas semanas, se les ha prohibido a las jóvenes asistir a la escuela.