El hombre que amenazó con detonar explosivos cerca del Capitolio en Washington, sede del Congreso de Estados Unidos, se entregó el jueves por la tarde «sin incidentes», informó la policía luego de horas de negociaciones.
La policía del Capitolio lo identificó como Floyd Ray Roseberry, de 49 años, residente de Grover, un pueblo en Carolina del Norte.
El jefe de la policía del Capitolio, Thomas Manger, dijo que Reseberry estuvo sentado en una camioneta «durante varias horas» frente a la Biblioteca del Congreso y había dicho tener explosivos.
Añadió que la policía intentó negociar con él mediante una pizarra, «simplemente escribiendo mensajes» y que luego logró hacerle llegar un teléfono. Pero poco después de que se lo dieran, abandonó la camioneta y se entregó a las autoridades.
«Salió del vehículo y se rindió, y las unidades tácticas que estaban cerca lo detuvieron sin incidentes«, dijo Manger en rueda de prensa.
«No sabemos si hay explosivos en el vehículo», explicó, señalando que aún debía registrarse la escena.
Un aparente extremista de derecha, Roseberry había estado transmitiendo en las redes sociales desde su camioneta, atacando al presidente Joe Biden y a los demócratas, hablando de una «revolución» y quejándose del gobierno de Estados Unidos y su política en Afganistán.
«Sabemos que el señor Roseberry ha tenido algunas pérdidas familiares. Creo que su madre falleció recientemente. Hablamos con miembros de su familia y había otros problemas con los que estaba lidiando», dijo Manger, sin dar más detalles en este momento.