En el Congreso se prendieron las alarmas por cuenta de un documento que fue enviado por el Departamento para la Prosperidad Social (DPS) al Congreso de la República, en el que alerta sobre la desfinanciación de varios programas para atender a la población vulnerable.
Varias comisiones del Senado están evaluando con detalle el presupuesto que se tiene previsto presentar para el 2022 y en medio de estas discusiones se encontró que los programas sociales tendrían un déficit de un poco de más de tres billones de pesos.
Según la advertencia hecha por el propio DPS, el programa ‘Familias en Acción’ y ‘Jóvenes en Acción’ tendría un déficit de más de 838.000 millones de pesos. Para infraestructura social, aunque se necesitan más de 1,7 billones de pesos, tan solo se asignaron un poco más de 457.000 millones de pesos, lo que quiere decir que el faltante es de más de 1,3 billones; y así ocurre con otros programas.
“Según estudios del Dane, realizados antes de la Emergencia Sanitaria, Social y Económica generada por el Covid-19, sin un programa como Familias en Acción cerca de 341.468 Personas caerían en pobreza extrema cada año”, indica el documento enviado a la Comisión Séptima del Senado.
Y advierte: “el proyecto de inversión de Compensación del IVA presenta un déficit para 2022 de $520.234 millones, correspondientes a 3,4 ciclos de pago (2.000.000 de hogares por ciclo de pago)”.
Adicionalmente, el Departamento para la Prosperidad Social y el Ministerio de Hacienda proyectaron que se necesitan más de 7 billones de pesos para financiar el programa de ‘Ingreso Solidario’. Dichos recursos dependen de la aprobación de la reforma tributaria que ya está siendo discutida en el Congreso.
A raíz de esta situación, en la Comisión Séptima del Senado se decidió conformar un grupo de legisladores para hacerle seguimiento al presupuesto que el Gobierno nacional ha destinado para atender la demanda social que tiene el país en medio de la pandemia de covid-19 que sigue latente.