En el marco del Encuentro por la Verdad para reconocer los impactos del conflicto armado en las universidades, la Comisión de la Verdad reveló que en los últimos 50 años han sido asesinados 603 estudiantes universitarios en Colombia.
Según explicó el comisionado Saúl Franco, los hechos victimizantes contra alumnos, docentes y trabajadores de las universidades públicas del país, no han cesado y los violentos han identificado a las aulas de clase como botines de guerra.
En ese mismo sentido, señaló que tan solo en la Universidad de Antioquia se registraron, en medio siglo, 323 agresiones de Derechos Humanos contra la población universitaria.
El comisionado indicó que de acuerdo con un experto investigador que se ha encargado de recopilar los casos de violencia armada en las instituciones de educación superior de carácter oficial y que ha contribuido con la Comisión de la Verdad, concluyó que cientos de personas han sido asesinadas.
«Es alarmante más de 603 estudiantes universitarios han sido asesinados en medio siglo, esto da un promedio de un estudiante asesinado por mes, durante 50 años, estas son cifras supremamente preocupantes (…)», sostuvo.
Agregó que «en uno de los informes que nos entregó la Universidad de Antioquia, nos da cuenta de 323 hechos victimizantes en 50 años, esto es supremamente grande».
Franco reconoció que ha sido complicado totalizar las cifras de agresiones de Derechos Humanos, entre las que se encuentran homicidios, secuestros, desapariciones forzadas, masacres y amenazas, entre muchos otras que se han registrado en el país.
También explicó que es enorme el subregistro de este tipo de ataques contra docentes, estudiantes, líderes sindicales y trabajadores de las universidades oficiales, además de otras barreras que se encuentran en medio de las investigaciones.
Exilio
La Comisión de la Verdad ha recopilado más de 250 testimonios de colombianos que tuvieron que abandonar sus vidas y empacarlas en un par de maletas para evitar ser asesinados, desaparecidos o torturados.
«Colombia le hará un aporte enorme al mundo mostrándole el problema del exilio y en este caso concreto, tenemos más de 250 testimonios de exiliados colombianos que se desarraigaron en su condición de universitarios, sean profesores, estudiantes, trabajadores; las únicas víctimas no han sido los estudiantes, los profesores y los trabajadores han puesto una cuota también importante», se indicó.
Franco finalmente señaló que «la Asociación de Trabajadores Universitarios redujo a la mitad el número de sus integrantes a raíz de las múltiples amenazas recibidas e inclusive, el asesinato y la desaparición de algunos de sus líderes, pasando de tener 6.000 integrantes a tener 3.000 miembros».
Entre los muchos hechos que ocurrieron en medio de la violencia se encuentran las masacres del 26 de septiembre de 1971, en Cali, y del Colectivo 82, en Bogotá; «la guerra sucia» contra estudiantes de la Universidad de Antioquia de la década del ochenta y de la Universidad del Atlántico en los noventa, y el ‘plan pistola’ contra miembros de la Universidad Industrial de Santander en los 2000.
