Cuando se cumplen cinco años desde que el Estado colombiano y la guerrilla de las Farc firmaron un Acuerdo de Paz que prometía acabar la eterna guerra de más de medio siglo con dicho grupo insurgente, las organizaciones sociales y civiles califican con un saldo en rojo, el cumplimiento de dichos tratados por parte del Gobierno nacional.
Según lo indicado por Eissenhower Dejanón Zapata, representante por Risaralda ante el Movimiento Nacional de Víctimas y Defensor de los Derechos Humanos, “en medio de este aniversario, la verdad hay que decir que el Gobierno nacional, en cabeza del presidente Iván Duque, pasa con un saldo en rojo, con una calificación muy negativa en materia de cumplimientos de los acuerdos firmados”.
Para el líder social risaraldense, hechos puntuales como la falla en materia de seguridad para cuidar la vida de los firmantes, así como las diversas trabas en materia de políticas agrónomas y el poco apoyo a los emprendimientos de los mismos, han llevado a esta calificación negativa desde algunas organizaciones sociales del departamento.
“Para el caso puntual de nuestro departamento, lo que hemos hecho es ser receptores de esos firmantes, de los ex guerrilleros que querían reincorporarse a la vida civil, vivir en condiciones de paz y por ello buscaban territorios como Risaralda, donde el nivel de seguridad es más alto que en otras regiones del país”, indicó Dejanón Zapata.
Sin embargo, como lo señaló el defensor de Derechos Humanos de esta parte del país, “el asesinato de esos firmantes, de los cuales ya se conocer algo así como más de 280 casos, es muy negativo para el proceso y en Risaralda ya tuvimos también uno de estos asesinatos, el de la señora de apellido Monroy”; se trató de Blanca Rosa Monroy, ultimada el pasado 2 de septiembre, cuando departía con unos familiares en una reunión social.
En cuanto a otros acuerdos, Dejanón indicó que “el Gobierno Nacional ha cumplido con algunos, por encimita, pero a regañadientes, ejemplo de ello son las curules para la paz, pues incluso habían demandado por inconveniente y tuvo que ser la Corte la que le diera la orden; en cuanto a los proyectos productivos sigue siendo otra de las actividades bastante incumplidas”.
Finalmente, otro punto que tocatiene que ver con la Reforma Rural Integral, primer punto de los acuerdos de La Habana y que tiene como propósito “contribuir a la transformación estructural del campo”. Para el defensor de derechos humanos, este es el que menos cumplimiento ha tenido y puede tener en el departamento, ya que de igual forma, “ni siquiera hay tierras suficientes para entregar a los campesinos de acá”.