Un vuelo con unos 80 refugiados afganos, entre ellos colaboradores que trabajaron para las autoridades españolas y sus familiares evacuados vía Pakistán, llegó este lunes a España.
El avión militar aterrizó en la base aérea de Torrejón de Ardoz, en Madrid, según mostraron imágenes de la televisión pública TVE. Los ministros de Defensa, Exteriores y Migraciones acudieron al aeropuerto para recibir la aeronave procedente de Islamabad.
Una fuente del gobierno que pidió el anonimato había confirmado en la jornada esta operación para traer a España vía Pakistán a afganos que trabajaron para el país europeo, sin ofrecer más detalles alegando «razones de seguridad».
Según varios medios españoles, entre ellos el diario El País y la radio pública, son en total unos 250 ciudadanos afganos, quienes atravesaron la frontera hacia Pakistán, de están siendo traídos a Madrid en dos aviones militares.
El primero transportó a unas 80 personas, entre ellas 14 colaboradores afganos y sus familias, según indicó TVE, que mostró imágenes de hombres, mujeres y niños descendiendo de la aeronave con algunas pertenencias.
El segundo avión con las personas restantes debe llegar el martes a la capital española. Esta operación llevaba tiempo siendo preparada por el gobierno español. El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, viajó a Pakistán y Catar en septiembre para abordar la cuestión.
Al igual que otros países occidentales, España implementó a fines de agosto un puente aéreo para sacar a centenares de personas de Afganistán, donde los talibanes tomaron el poder.
Las evacuaciones terminaron con la salida de los últimos soldados estadounidenses que controlaban el aeropuerto de Kabul. En total, España logró evacuar de Kabul a 2.206 personas, en su inmensa mayoría afganos, de los cuales 1.671 eran colaboradores que trabajaron para España, que salieron del país sus familias.
El presidente del gobierno, Pedro Sánchez, dijo a fines de agosto que España no abandonaría a aquellos afganos que no habían podido salir y deseaban hacerlo.
El jefe de la diplomacia de la Unión Europea, el español Josep Borrell, llamó el viernes a los Estados miembros a acoger al menos a entre 10.000 y 20.000 refugiados afganos adicionales.
«Pero para acogerlos hay de sacarlos, y en eso estamos también, y no es tan fácil», dijo Borrell en un foro en Madrid.
