El juicio del colombo-venezolano Alex Saab, considerado el testaferro del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y acusado en Estados Unidos de conspiración para lavado de dinero, no se iniciará el 3 de enero de 2022 como estaba previsto, sino en una fecha que se determinará el 7 de enero.
Así lo decidieron las partes en una breve audiencia celebrada este lunes y encabezada por el juez Robert N. Scola, a la que acudió Saab acompañado de sus abogados y en la que se abordó la necesidad de un calendario «razonable» para el proceso.
Los documentos judiciales de la audiencia señalan que la defensa de Saab y la Fiscalía convinieron en que la fecha del 3 de enero no era «realista» y el juez fijó para el 7 de enero próximo una audiencia para acordar cuándo comenzará.
La audiencia de hoy, que estaba prevista para el 28 de diciembre, se adelantó por petición de la defensa de Saab, a lo que el juez accedió.
Saab, de 49 años, fue extraditado a Estados Unidos en octubre desde Cabo Verde, donde fue detenido el año pasado a raíz de una orden de captura internacional pedida por la Justicia estadounidense.
El empresario enfrenta un cargo de conspiración para cometer lavado de dinero en una corte de Miami, del que se declaró «no culpable» el pasado 15 de noviembre ante la jueza Alicia M. Otazo-Reyes.
El juez Scola desestimó a principios del mes siete cargos de lavado de dinero contra el acusado, que fue extraditado desde Cabo Verde, el pasado 16 de octubre.
La reducción de cargos hizo parte del acuerdo de extradición con el Gobierno de Cabo Verde para que, en caso de que sea hallado culpable, la sentencia no exceda la que hubiera tenido en ese país africano.
Saab enfrenta una condena de unos 20 años si es hallado culpable del único cargo que tiene en la corte de Miami, pena que puede ser reducida si hace un trato con la Fiscalía, que suele incluir delación de otras personas.
El juez Scola ordenó el 29 de noviembre vetar al público las pruebas y documentos que se presenten como parte del juicio al colombo-venezolano Alex Saab.
El juez Robert N. Scola Jr. accedió así a una petición de la Fiscalía de Estados Unidos, que contó con la aprobación de la defensa de Saab, según documentos judiciales.