Ante este hecho, la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) clamo por el respeto a la vida e integridad de líderes que, como Daniel Abril, trabajan porque los derechos de las comunidades y grupos a los que representan sean respetados y promovidos.
Aunque las circunstancias de estos hechos son motivo de investigación por las autoridades, así como su nexo con la labor social que ejercían, la ACNUR resalto los efectos de estas violaciones a la vida, no se cuentan únicamente como la lamentable pérdida de vidas humanas, sino también en el amedrentamiento general sobre los procesos sociales que este impulsaba.
En medio de los importantes esfuerzos que vienen haciendo el Gobierno nacional y la guerrilla de las Farc por acordar el fin del conflicto y sentar las bases para construir la paz en todas las regiones del país, es altamente preocupante estos hechos y por ello ACNUR hizo un llamado a que sea respetada y protegida la vida de las víctimas y sus representantes, con garantías suficientes para ejercer su liderazgo.
ACNUR respaldo a la Mesa de Víctimas de Trinidad, y se solidarizó en estas difíciles circunstancias con ellas y con las familias de las víctimas.