El expresidente Álvaro Uribe cumplió con su advertencia y denunció por calumnia ante la Fiscalía General de la Nación a la excongresista Zulema Jattin, luego de los señalamiento que hizo la dirigente política ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP).
Jattin señaló ante los magistrados de ese tribunal, que supuestamente Uribe, cuando era candidato presidencial en el 2002, le pidió no denunciar las supuestas presiones que estaba ejerciendo el entonces jefe paramilitar Salvatore Mancuso en Córdoba, para las elecciones de esa época.
Uribe desmintió esas afirmaciones y negó tener cualquier tipo de vínculo con el escándalo de la parapolítica. “Por intermedio del doctor Abelardo de la Espriella he presentado denuncia penal contra la señora Zulema Jattin”, infirmó el exmandatario en sus redes sociales.
El exmandatario también había negado reuniones con congresistas y dirigentes relacionados con grupos paramilitares, como Miguel de la Espriella y Eleonora Pineda.
“Como se dijo hace años a la opinión pública, Miguel Alfonso de la Espriella, durante la campaña me transmitió una invitación para reunirme con los paramilitares, le contesté que si me reunía con los paramilitares no podría ser Presidente de la República”, indicó en un reciente comunicado.
“El tema de la “Parapolítica” en Córdoba se empezó a conocer en noviembre de 2006 cuando el dr De la Espriella denunció la existencia del Pacto de Ralito. Ni antes ni después asistí a reuniones con parlamentarios para hablar de este tema o de temas relacionados”, añadió.
Uribe desestimó el testimonio de Zulema Jattin ante la JEP y dijo que le parece “risible” que los magistrados de esa jurisdicción estén tomando como novedosa la declaración de la excongresista, cuando esos hechos ya habían sido desvirtuados en el pasado.
Fuente: Sistema Integrado de Información – RCN Radio – Daniel Jerez