FC Barcelona jugará este martes por primer vez en su historia un partido oficial en un estadio icónico del Calcio, el San Paolo de Nápoles, después de haberlo hecho en muchísimos campos italianos, pero nunca en el feudo del venerado Diego Armando Maradona.
Barcelona y Nápoles tienen una historia muy intensa a mediados de los años ochenta del siglo pasado, cuando el equipo catalán se quiso deshacer de Maradona y apareció un comprador en el sur de Italia, que encontró en el ‘pelusa’ a una divinidad, pues su historia deportiva dio un vuelco espectacular para bien con la llegada del argentino.
No obstante, ambos clubes nunca llegaron a medirse en un campo de fútbol en partido oficial, sí en cambio en cinco amistosos, dos de los últimos jugados el pasado verano en Estados Unidos, con triunfo ‘azulgrana’ en ambos: 0-4 en Michigan y 2-1 en Miami.
Los dos equipos quedaron emparejados en el sorteo para octavos de fina de la Liga de Campeones del pasado 16 de diciembre en Nyon, con ida en San Paolo (25 de febrero) y vuelta en el Camp Nou (18 de marzo). El Barcelona accedió a esta ronda como primero de grupo (14 puntos), aventajando en cuatro al Borussia Dortmund y en siete al Inter de Milán.
Por su parte, el Nápoles acabó invicto en el suyo, pero acabó segundo (12 puntos), uno menos que el Liverpool, vigente campeón del torneo. El Nápoles es de los pocos equipos que ha vencido al conjunto inglés este curso, al que derrotó en San Paolo (2-0) y después arrancó un empate en Anfield (1-1)
Un dato curioso es que al finalizar el último partido de la fase de clasificación, y derrotar por 4-0 al Genk belga, al día siguiente el Nápoles destituyó a Carlo Ancelotti como entrenador y fichó a Gennaro Gattuso, un icono del Milan.
Así, lo más sorprendente es que los dos equipos llegan a octavos con entrenadores diferentes del último partido de la fase de grupos, ya que en enero el Barcelona tomó el mismo camino, al cambiar a Ernesto Valverde por Quique Setién, en una situación diferente, ya que el Barça era líder en la LaLiga, primero en la Champions y seguía vivo en la Copa.
Aquella destitución tuvo más que ver no por el momento, sino porque el fútbol de los ‘azulgrana’ hacía temer a la junta una nueva debacle en Europa, como en los dos anteriores cursos.
A diferencia del Barcelona, el Nápoles sí que se ha reforzado en el mercado de inverno, con la llegada del centrocampista Diego Demme (Leipzig), Stanislav Lobotka (Celta) y atacante Matteo Politano (cedido del Inter de Milán).
Los ‘azulgranas’, en cambio, sólo han podido contratar a un refuerzo, el danés Martin Braithwaite, pero fuera de mercado, con lo que no ha podido ser inscrito para jugar en Europa. El jugador viajó con sus compañero y podrá vivir mañana el debut oficial del Barça en un campo mítico.
Texto realizado por David Fernando Rocha / Artículo tomado de RCN RADIO
