El presidente de EE.UU., Joe Biden, presentará un proyecto presupuestario en el que se propone acabar con los subsidios a las petroleras, bajar los precios de los medicamentos y financiar con dinero público la educación infantil, adelantó este miércoles a Efe un funcionario de la Administración.
Esta medida busca reducir el déficit público en tres billones de dólares durante la próxima década, según explicó la Casa Blanca y para lograrlo, el presidente propondrá acabar con beneficios fiscales que las compañías de gas y petróleo reciben por sus inversiones, al igual que otros tratamientos especiales fiscales a las energéticas.
«A pesar de que se benefician de miles de millones de dólares en exenciones tributarias, las compañías petroleras no han invertido en producción», subrayó este funcionario.
Para abordar el presupuesto sanitario, el presidente propondrá medidas con las que espera reducir el gasto federal en 160 mil millones de dólares y también planteará que el gobierno pueda, a través de Medicare, el plan sanitario federal, negociar el precio de una mayor cantidad de medicamentos.
Sin embargo, no todo serán recortes en el nuevo presupuesto, el funcionario adelantó a EFE que el gobierno demócrata buscará destinar dinero del gobierno federal para financiar la educación infantil, con una inversión de más de 22.000 millones de dólares para programas de educación temprana.
Los republicanos, que controlan desde el pasado enero la mayoría de la Cámara de Representantes, ya señalaron que se opondrán al proyecto económico del presidente una vez llegue al Congreso para ser aprobado.
«El presupuesto del presidente está repleto de lo que harían (los demócratas) si pudieran: un incremento masivo de impuestos y más gastos. Menos mal que la Cámara Baja es republicana», dijo el líder del partido opositor en el Senado, Mitch McConnell este martes.
La Casa Blanca defendió también los planes económicos de Biden, asegurando que no necesitarán de recortes en programas sociales como el plan sanitario Medicare, como sí han propuesto los republicanos.
El presidente, dijo la portavoz Karine Jean-Pierre, está «luchando por los contribuyentes» y a la vez «se toma muy en serio la responsabilidad fiscal».
La Oficina Presupuestaria del Congreso de Estados Unidos pronosticó en febrero que la deuda pública del país se elevará hasta el 118 % del Producto Interior Bruto (PIB) en los próximos diez años y que el déficit aumentará en 18,8 billones de dólares.
El órgano atribuyó los aumentos a nuevas legislaciones promulgadas y a las subidas de gastos en programas obligatorios como el de la Seguridad Social.
Fuente: EFE -RCN Radio