La Prelatura de Itacoatiara se encuentra en la región del Amazonas y abarca una superficie de más de 58.000 kilómetros cuadrados, con lo que es mayor que algunos de los países europeos más pequeños como Holanda o Suiza. Allí, las principales rutas son los ríos, ya que apenas hay carreteras y los vuelos en avión son muy caros. Las distancias son inmensas: por agua pueden ser de hasta 2000 kilómetros (!). Por esta razón, los escasos sacerdotes solo pueden visitar algunas parroquias una o dos veces al año. En dichas visitas, mientras el sacerdote se concentra en la administración de los sacramentos, los misioneros laicos que lo acompañan imparten la catequesis y otras formas de enseñanza de la fe.
La parroquia de Cristo Rey, con sede en la ciudad de Itacoatiara, cuenta con 48 filiales. Cinco de ellas están situadas en una isla del Amazonas, y otras treinta están a orillas del río Arari. La gran mayoría de estas comunidades ribereñas disponen de una capilla, pero algunas son demasiado pobres para erigir una. Las actividades pastorales en las parroquias incluyen la Liturgia de la Palabra, la catequesis, la preparación para los sacramentos, la educación sanitaria y mucho más. En un pequeño bote se necesitan diez horas llegar a la parroquia más lejana.
Hasta ahora, la parroquia solo cuenta con una lancha con un motor de 70 caballos con cabida para siete personas. Esta embarcación ya se compró usada hace años, y ahora se avería con frecuencia. Además, se ensambló con dos barcos más pequeños y no es estable: cuando el nivel del agua sube, a menudo flotan en el agua troncos de árboles, por lo que existe un alto riesgo de colisión, que podría partir en dos la lancha. A ello cabe añadir el gran gasto en carburante.
Fuente y foto: ACN Colombia