Miles de presos necesitan de la tutela para garantizar su salud. En contraste, Aida Merlano se fugó en una cita de diseño de sonrisa.
Mientras Aída Merlano obtenía permiso para una cita de diseño de sonrisa, en los anaqueles de las autoridades carcelarias hay 2.958 tutelas interpuestas por personas privadas de la libertad que tuvieron que apelar a ellas para acceder a servicios relacionados con su salud y alimentación.
Esta cifra representa el 84 % del total de 3.576 que ha presentado este año la población carcelaria. Dicho de otro modo, cada día se interponen diez tutelas para intentar acceder a salud en las cárceles del país.
Los datos, que fueron reportados por la Oficina Jurídica de la Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios (USPEC), van desde el 1 de enero hasta el 30 de septiembre de este año.
Enfermedades urgentes, contagiosas o crónicas sin atención
Casi todas las acciones están relacionadas con enfermedades crónicas, enfermedades agudas que requieren atención inmediata o condiciones con un alto potencial infeccioso.
Llaman la atención docenas de afecciones que, por su dolor, requieren tratamiento urgente como fracturas de huesos de las piernas, suministro de analgésicos fuertes como el tramadol, cálculos de vesícula, cálculos de riñón, una artritis séptica en la coyuntura izquierda de la cadera, un transplante de hígado, hernias en la columna, hipertrofia mamaria y apendicitis.
También identificamos cuadros de enfermedades crónicas crónicas que requieren atención constante como tratamientos para el manejo de diabetes, terapias para tratar tumores, epilepsia, VIH, insuficiencia cardíaca, leucemia y osteomielitis
Otra buena parte de los requerimientos refieren prótesis dentales, anteojos, aunque en ninguno encontramos diseño de sonrisa. En cambio sí registran enfermedades con alto potencial infeccioso como casos de tuberculosis.
En la cárcel de Florencia nos encontramos con un fallo de tutela descrito así: “La representante del interno requiere que se le brinde tratamiento médico integral como traslados y todos los gastos que surjan para la recuperación del interno en sus patologías, ya que está en estado de coma”.
Para inicios de año se registró en la base de datos un desacato a una tutela que fue fallada hace cuatro años, en 2015.
Acacías, La Picota y Picaleña, las más afectadas
La Regional Central fue en la que mayor número de recursos constitucionales tuvieron que interponerse para el acceso a la salud con un total de mil 300, seguida de la Regional Occidente con 500 tutelas y la regional Viejo Caldas con 467 tutelas.
El centro de detención con mayor número de tutelas este año es la Penitenciaria Nacional de Acacías, en el Meta (con 291), seguida de la Cárcel La Picota (con 275) y la Cárcel de Picaleña en Ibagué (con 268 casos).
Agosto fue el en el que más se registraron tutelas, con 393 acciones, mientras que en junio hubo 248 tutelas interpuestas, siendo el único mes en el que el número fue inferior a 300.