El arzobispo de Colonia, el cardenal Rainer Maria Woelki , admitió este martes que en su arquidiócesis se produjo un «encubrimiento sistémico» de casos de abusos a menores, tras conocerse un informe que analiza decenas de ellos entre 1975 y 2018, y rechazó dimitir del cargo.
Woelki reconoció que en la administración de la arquidiócesis hubo «caos» y un «sistema de silencio, secreto y descontrol» y, «generalmente hubo falta de compasión, en general hubo falta de empatía», antes de lamentar que «eso nunca debería haber sucedido así».
El informe, dado a conocer la semana pasada y elaborado por un despacho de abogados de la ciudad del oeste alemán, encontró que altos jerarcas de la Iglesia católica supieron de casos de abusos sexuales a menores pero incumplieron con su deber de reportarlos debidamente y actuar.
El informe exoneró de responsabilidad a Woelki, arzobispo de Colonia desde 2014, en un análisis que confirmó la existencia de 314 casos de abusos a menores e identificó a 202 presuntos autores de ellos.
Los autores del análisis de lo que ocurrió en la arquidiócesis encontraron sin embargo que el arzobispo de Hamburgo, Stefan Heße, y el fallecido cardenal Joachim Meisner, arzobispo de Colonia desde 1989 hasta 2014, faltaron a su deber en relación con esos abusos en 11 y 24 casos, respectivamente.
El abogado Björn Gercke, uno de los responsables del informe, explicó que al elaborarlo se constató que muchos documentos fueron destruidos en aplicación de las normas del Derecho Canónico.
El cardenal Woelki se refirió al caso del sacerdote de Düsseldorf Johannes O., al que se atribuyen abusos que el arzobispo presuntamente encubrió y dijo que el informe constata que él mismo actuó «de manera diligente y legal».
Sin embargo, «podría y debería haber informado del caso a Roma. Pero no lo hice, hubiera sido mejor de otra manera», agregó el cardenal, quien rechazó dimitir por su comportamiento ya que eso sería «demasiado fácil»: «Una renuncia así sería solo un símbolo que duraría poco», agregó.
«En el futuro haré todo lo posible para asegurarme de que no se produzcan más errores», prometió el arzobispo.
El contenido del informe se conoce tras meses de críticas a la jerarquía de la Iglesia católica en Alemania por la falta de claridad a la hora de abordar la cuestión de los abusos a menores y en el contexto de un incremento del abandono de los fieles católicos.
En 2019 se registraron 272.771 abandonos de la Iglesia católica en Alemania, un récord y último año del que se tienen datos, según las cifras de la Conferencia Episcopal, que indican que la Iglesia evangélica registró la salida de 270.000 fieles.