Sin duda alguna la pandemia del coronavirus ha afectado seriamente a los países de América Latina y pese a que la producción de la vacuna representa una luz de esperanza para superar la crisis, los nuevos picos de contagio aparecen como un golpe de realidad que indica que aún falta un largo camino para superar la emergencia.
Pese a que la mayoría de gobiernos han sido muy insistentes en pedirle a la población un estricto cumplimiento de las normas distanciamiento preventivo, prácticas de autocuidado y protocolos de bioseguridad, algunos ciudadanos aún subestiman los efectos del virus y por ello toman a la ligera las medidas de precaución establecidas por las autoridades.
Prueba de ello es el fenómeno de las fiestas clandestinas, en donde las personas deciden aglomerarse en espacios cerrados para bailar y consumir bebidas alcohólicas. Dicha práctica no solo viola todas las medias de bioseguridad dispuestas por las autoridades al crear focos de contagio del virus, también pone en riesgo a las personas que eventualmente tendrán contacto con los que asistieron a una fiesta clandestina.
Ante la gravedad de la situación, el gobierno de Chile ha decidido tomar cartas en el asunto y así tratar de ponerle fin a un fenómeno que impide controlar la velocidad de contagios en el país austral. Por esta razón, Rodrigo Delgado, ministro del interior de Chile, anunció la creación de una nueva ley para amonestar a quienes sean encontrados en una fiesta clandestina.
De acuerdo con el anuncio del ministro Delgado, las personas que asistan y que organicen fiestas clandestinas serán obligados a cuidar pacientes con Covid-19. Según el reporte del funcionario chileno, desde abril del 2020 las autoridades han detectado 148 fiestas ilegales y se realizó la detención de aproximadamente 2 mil 500 por este hecho.
Cabe recalcar que Chile ha registrado más de 680.000 contagios de coronavirus, mientras que más de 17.500 personas han muerto desde marzo de 2020 cuando se confirmó el primer caso en el país.
¿En qué consiste la nueva ley?
La norma establece que las personas que reciban una condena por participar en una fiesta clandestina podrán acceder a una pena alternativa, fiestas por ejemplo el realizar un trabajo voluntario. Una de las opciones contempladas en la normativa es el realizar un servicio social cuidando a personas enfermas con Covid-19.
El ministro Rodrigo Delgado consideró que este tipo de sanciones podrían contribuir a generar una mayor consciencia sobre el dolor que el coronavirus ha llevado a las familias, que sufren al tener a un ser querido al borde de la muerte.
«Si no van a contribuir a detener la enfermedad, que no contribuyan a extender la enfermedad. Espero que visualicen el sufrimiento que genera esta enfermedad. Que puedan estar en contacto con familias que han perdido un ser querido o con familias que tienen a alguien complicado el punto de vista de salud».
En este sentido, Delgado manifestó que es necesario comenzar a contemplar sanciones que para impedir que las personas que no están cuidado de su salud, terminen afectando la salud de los demás.
Fiestas clandestinas en Colombia
En varias ciudades del país también se está registrado esta problemática y pese a que los mandatarios locales han tomado medidas para intentar contener la propagación del virus, los ciudadanos hacen caso omiso de ellas y asisten a fiestas ilegales.
Pese a que ciudad de Bogotá enfrenta un considerable incremento de contagios y muertes por Covid-19, continuamente aparecen reportes sobre grandes grupos de personas que se reúnen para participar en fiestas clandestinas. En los últimos días las autoridades hallaron a cerca de 60 personas, en la localidad de Usme, que estaban en medio de una fiesta ilegal.
«La irresponsabilidad de unos pocos no tiene límites. Anoche en Usme encontramos 37 personas en una gallera consumiendo licor, y otras 25 en un billar. Podemos seguir cerrando sitios e imponiendo comparendos, pero no hay multa que pague sus vidas y la de sus familias”, indicó en su momento la Secretaría de Gobierno de Bogotá.
Las autoridades de Bogotá indicaron que se han realizado más de 1.500 operativos en las 20 localidades de la ciudad y se han sido impuesto más de 720 comparendos.
Un panorama similar se registra en la ciudad de Cali, donde en los últimos días se han intervenido más de 97 celebraciones ilegales, en diferentes puntos de la capital del Valle.
De acuerdo al reporte de la policía de Cali, se han registrado 1.409 hechos de alteración a la tranquilidad y hasta se han impuesto más 1.000 comparendos en el área metropolitana.
Foto: RCN Radio
