Hasta el 15 de octubre fue el plazo que dio el presidente de EE.UU., Donald Trump, para aumentar los aranceles que impone la administración norteamericana contra productos chinos.
En el marco de la guerra comercial entre Estados Unidos (EE.UU.) y China, este miércoles ambos países acordaron retomar las negociaciones el próximo mes de octubre, aunque la hostilidad de Washington continúa contra Beijing.
Hasta el 15 de octubre fue el plazo que dio el presidente de EE.UU., Donald Trump, para aumentar los aranceles que impone la administración norteamericana contra productos chinos, por un precio de 250.000 millones de dólares.
“A pedido del viceprimer ministro de China, Liu He, y ante la celebración, desde el 1 de octubre, del 70 aniversario de la República Popular de China, hemos acordado, en señal de buena voluntad, aplazar el aumento de derechos aduaneros (de 25% a 30%) sobre los productos (chinos) equivalentes a 250.000 millones de dólares hasta el 15 de octubre”, escribió Trump en su cuenta en Twitter.
“China suspends Tariffs on some U.S. products. Being hit very hard, supply chains breaking up as many companies move, or look to move, to other countries. Much more expensive to China than originally thought.” @CNBC @JoeSquawk
Por su parte, Beijing intenta aliviar la tensa situación sobre los fabricantes chinos, debido a estos aranceles, al tiempo que EE.UU. se pone en situación desventajosa en la guerra arancelaria contra el gigante asiático.
“Si pones aranceles, esperas que el déficit se cierre; pero eso no está pasando. EE.UU. no está cerrando su brecha con China, al menos de manera significativa”, afirmó el coordinador del Observatorio Económico Latinoamericano, Oscar Ugarteche.
Mientras tanto, China continuará con el gravamen a la mayoría de las importaciones que se hagan de EE.UU., como la carne de cerdo, aunque ha exentado a algunos productos estadounidenses.