La Corte Suprema de Justicia le pidió formalmente al Gobierno que solicite la extradición de la excongresista Aida Merlano para que cumpla la condena de 15 años impuesta por hechos relacionados con corrupción electoral.
La solicitud está basada en un acuerdo bolivariano firmado en 1911 que contempla la extradición entre Colombia, Venezuela, Perú y Ecuador. El alto tribunal considera que en este caso se cumplen todos los requisitos para que Merlano sea extraditada.
El pasado jueves, la excongresista declaró ante el Tribunal de Justicia de Venezuela en el marco del proceso que se le adelanta en ese país por utilizar documentos falsos e ingresar irregularmente en su territorio.
Merlano justificó su llegada a ese país asegurando que existe un plan para asesinarla por los secretos que sabe sobre la corrupción electoral en el departamento del Atlántico que vinculan a las castas políticas de las familias Char y Gerlein.
En su declaración, que duró 50 minutos, la excongresista señaló que en diferentes oportunidades le manifestó a las autoridades colombianas su interés en colaborar con la entrega de información frente a los hechos que rodearon la compra de votos para su campaña política y las personas que estarían relacionados con el plan.
Esto generó que el empresario Roberto Gerlein, principal financiador de su campaña, le reclamara puesto que sabía que iba a afectar a muchas personas poderosas de la Costa.
Fue el mismo empresario, según Merlano, quien junto a Arturo Char le ayudaron en el plan para fugarse, hechos que se presentaron el 1 de octubre de 2019 después de asistir a una cita odontológica en el norte de Bogotá.
Sin embargo, aseguró que su plan de fuga se convirtió en un secuestro puesto que fue trasladada a una finca ubicada a las afueras de Valledupar. Allí conoció, por parte de uno de las personas que la cuidaban, que existía un plan para asesinarla y arrojar su cuerpo a una fosa común.
Debido a esto, tomó la decisión de fugarse y emprender un largo recorrido hasta Venezuela. Merlano le solicitó perdón a las autoridades venezolanas por ingresar con documentos falsos a su país pero señaló que se trataba de un caso de vida o muerte.
Compra de votos
En su extensa declaración, Merlano indicó que el tema de la compra de votos se ha presentado en los últimos años en todo el país, reseñando que los últimos presidentes de la República (desde Álvaro Uribe, pasando por Juan Manuel Santos e Iván Duque) fueron elegidos con este tipo de presión.
«Fui testigo de altas sumas de dinero entregada en las campañas presidenciales», reseñó Merlano en uno de los apartes de su declaración y la cual fue recopilada por el Gobierno de Venezuela en un comunicado oficial.
Reseñando el tema de la compra de votos en las campañas electorales, aseguró que las “casas políticas” de la Costa siempre han manejado así las elecciones, asegurando que el 90% del Congreso fue elegido utilizando este tipo de estrategias.
En este punto acusó al exvicepresidente Germán Vargas Lleras de tener conocimiento claro frente a este tipo de actuaciones ilegales puesto que él es muy cercano a las “casas políticas”.
Merlano le pidió protección a Gobierno de Nicolás Maduro y pidió, nuevamente, que su caso sea llevado a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) puesto que se presentaron graves irregularidades.
Campaña de Juan Manuel Santos
En su extensa declaración, Merlano aseguró que conoció de primera mano que la campaña presidencial de Juan Manuel Santos recibió financiación de la multinacional Odebrecht.
Esta situación, detalló, fue conocida también por el entonces fiscal General, Néstor Humberto Martínez quien no adelantó las respectivas acciones para investigar.
La excongresista señaló a Juan Char –integrante de la denominada ‘casa Char’- de manejar a su antojo la Fiscalía. Fue él –según Merlano- quien le avisó a Julio Gerlein que ella quería colaborar con las autoridades.
Esto generó que el empresario la llamara para hacerle un fuerte reclamo puesto que sabía que él caería en su colaboración con las autoridades judiciales.
En la diligencia de juicio que se adelantó el pasado jueves la excongresista llegó con una chaqueta de color rojo, camisa blanca, pantalón negro de cuero, botas de tacón, maquillada, sin esposas y solamente escoltada por cuatro policías.
La excongresista fue capturada el pasado 28 de enero en un apartamento en Maracaibo, Estado del Zulia, por parte de Fuerzas de Acciones Especiales (FAES). Tras ser requerida presentó documentación falsa.
Merlano enfrenta un proceso penal por falsedad en documentos e ingreso ilegal a ese país.
La Sala de Primera Instancia de la Corte Suprema de Justicia la condenó a 15 años de prisión por su responsabilidad en corrupción electoral para los comicios de marzo de 2018.
Pocos días antes de fugarse había manifestado su intención de colaborar con las autoridades en las investigaciones por corrupción electoral.
