Este demanda se suma a las presentadas contra las aerolíneas American Airlines y Latam por operar en el Aeropuerto Internacional José Martí.
El nieto del dueño de una propiedad confiscada en Cuba tras la revolución castrista de 1959 demandó a la multinacional estadounidense Amazon en una corte de Miami por vender carbón extraído de esta mina de la provincia de Oriente.
La demanda, presentada en una corte federal de Miami por el estadounidense Daniel A. González, se acoge a la ley Helms-Burton como lo han hecho recientemente otros ciudadanos en procesos legales contra las aerolíneas American Airlines y LATAM y compañías de cruceros como Carnival Corporation.
González expone en la demanda que es nieto de Miguel González Rodríguez, fallecido en 1987 y que posee el título de propiedad de 2.000 acres (810 hectáreas) de tierra donde se extrae carbón.
Según la denuncia, «Amazon se benefició y traficó con la propiedad confiscada al vender en su sitio web carbón producido en la propiedad».
El demandante recordó que hace sesenta años «los soldados comunistas» le dieron a su familia «siete días para abandonar la propiedad solo con sus pertenencias personales».
González calificó en el comunicado de «irónico» que el fundador de Amazon, Jeff Bezos, se aproveche de los bienes confiscados en la isla, país del que procede su padrastro, Miguel Bezos, exiliado cubano que dejó su país con 16 años.
«La compañía se está beneficiando de las propiedades incautadas por el mismo régimen comunista del cual (el padre de Bezos) huyó», agregó.
La demanda incluye a Fogo Charcoal, una empresa con sede en Miami que en su opinión también se «ha beneficiado y traficado con la propiedad incautada».
«Los daños totales solicitados para el caso son sustanciales dado el tamaño y el valor de la tierra expropiada», expresó por su parte el abogado Santiago A. Cueto.
Este demanda se suma a las presentadas contra las aerolíneas American Airlines y Latam por operar en el Aeropuerto Internacional José Martí de La Habana, en nombre de José Ramón López Regueiro, hijo de quien fue su propietario hasta su expropiación hace 60 años, José López Vilaboy.
Estas demandas son ahora posibles tras la activación este año por parte del gobierno de Donald Trump del título III de la Ley Helms-Burton de 1996, que estuvo en suspenso durante más de 20 años.
Ese título faculta a los ciudadanos estadounidenses cuyas propiedades en Cuba fueron confiscadas después del triunfo de la revolución en 1959 a demandar en tribunales de Estados Unidos a las empresas que se beneficien de esos activos.
Desde su entrada en vigor son muchas las empresas demandadas, entre ellas están también Expedia, Booking, Trivago, Meliá, Barceló, Iberostar, Accor y Blue Diamond, así como el banco Société Générale, pero hasta ahora no ha habido fallos judiciales.