Aunque voceros de la administración del presidente Iván Duque se ha mostrado dispuestos a dialogar con la minga indígena, algunos sectores políticos le han pedido al Gobierno estar preparado para enfrentar cualquier hecho de violencia que se pueda presentar.
Además, este 21 de octubre está programada una nueva jornada de paro nacional a la que posiblemente puedan unirse los integrantes de las comunidades que llegaron a Bogotá provenientes del sur del país.
Esto ha llevado a que desde el Centro Democrático se le haya pedido al mandatario tener listo el decreto de conmoción interior para poder atender cualquier circunstancia difícil que se pueda presentar en materia sanitaria o de orden público.
El senador Fernando Nicolás Araújo manifestó que “siguiendo el principio de precaución y de manera preventiva para evitar problemas y riesgos a la salud pública de Bogotá y evitar desmanes y violencia que afecten la vida, honra y bienes de los ciudadanos, yo sí le he solicitado al Gobierno Nacional tener listo el decreto de conmoción interior y expedirlo de ser necesario”.
Dijo además que “hay medidas que se pueden ir realizando de manera gradual como el acompañamiento de la Fuerza Pública a la minga y distintas expresiones sociales, pero también si es necesario decretar toques de queda, hay que hacerlo”.
El uribismo considera que mantener la seguridad ciudadana, la autoridad y el orden, debe ser una prioridad en el país, en momentos en que se está avanzando en la recuperación económica.
Hay que recordar que el Juzgado 40 del Circuito de Bogotá admitió una acción popular que habían presentado algunos integrantes del Centro Democrático en contra de la minga indígena y expidió medidas cautelares para que tango el Gobierno como la Alcaldía tomen acciones para garantizar las medidas de bioseguridad durante la movilización.
