El Departamento de Estado de Estados Unidos presentó un breve informe que confirma la persistencia de actos terroristas en Colombia para 2019 a manos de disidentes de las Farc y el ELN, «incluyendo bombardeos, violencia contra la población civil y ataques violentos contra instalaciones militares y policiales».
Según la publicación, es evidente cómo el ELN ha tomado el lugar, en algunas áreas de Colombia, que los ex-combatientes de las Farc dejaron vacías tras renunciar a las armas, reconociendo también falencias en la aplicación del acuerdo de paz.
«Los continuos problemas de aplicación del acuerdo de paz y los continuos vacíos de seguridad crearon el riesgo de que en 2019 se produjeran actividades terroristas y ataques contra civiles, fuerzas de seguridad e infraestructura en algunas zonas».
En ese sentido, el informe destaca que «unos 2.600 disidentes de las FARC que nunca se desmovilizaron, abandonaron el proceso de paz o son nuevos reclutas, continuaron con sus ataques violentos, principalmente para permitir el tráfico de estupefacientes y otras actividades delictivas, en particular en las regiones fronterizas y las zonas anteriormente controladas por las antiguas Farc.
Seguridad fronteriza
El Departamento de Estado insiste en el texto las fronteras de Colombia, sobre todo con Venezuela, «sigue siendo una esfera de vulnerabilidad, ya que los agentes de represión siguieron enfrentándose al reto de trabajar en zonas con fronteras porosas, topografía difícil, grupos armados ilegales y tráfico de drogas«.
Al respecto se señala que «Cuba y Venezuela continuaron proporcionando entornos permisivos para los terroristas. En Venezuela, individuos vinculados a disidentes de las Farc y el ELN, así como simpatizantes de Hezbolá, estuvieron presentes en el país. Nicolás Maduro ha dado la bienvenida abiertamente a los ex líderes de las Farc que anunciaron un regreso a las actividades terroristas».
Los datos que ofrece este miércoles Estados Unidos dan cuenta de que para diciembre «los artefactos explosivos improvisados que se sospecha que han sido colocados por grupos como disidentes de las Farc, miembros del ELN y otros, han matado a 10 e hirieron a 56 agentes de policía, militares y civiles que participaban en operaciones manuales de erradicación de la coca».
Fuente: Sistema Integrado de información
Foto: RCN Radio