Dando cumplimiento a la sentencia proferida por el Juzgado Segundo Administrativo de Descongestión del Circuito Judicial de Duitama el 30 de agosto de 2013 y confirmada por el Tribunal Administrativo De Boyacá mediante proveído del 18 de septiembre de 2014, se llevó a cabo el acto ceremonial de disculpas públicas por parte del Ejército Nacional, con respecto a los hechos ocurridos el 26 de noviembre de 2007 en la vía que conduce a la vereda El Silencio del municipio de Cubará, en los cuales fallecieron injustificadamente los señores Samuel Navia Moreno (Q.E.P.D) Y Jhon Carlos Nocua Rueda (Q.E.P,D).
El acatamiento judicial proferido hacia el Batallón Especial Energético y Vial Nº1 “General Juan José Neira Velasco”, se llevó a cabo el día viernes 8 de abril de 2016 en las instalaciones del Grupo de Caballería Mecanizado Nº18 “General Gabriel Revéiz Pizarro” previo acuerdo mutuo con el representante apoderado del caso por las familias; a donde fueron formalmente invitados los medios de comunicación de carácter local, regional y nacional; así como todas las autoridades y personas del municipio de Saravena en general, que desearan asistir.
Con unas sentidas palabras, en las que el deber moral de los soldados se hace manifiesto, el Teniente Coronel Ángel Gustavo Sánchez Hernández, expresó de forma sincera las excusas a las familias y a toda la comunidad de Saravena, en nombre de la Nación, el Ministerio de Defensa Nacional y la Institución, reiterando que se mantiene el compromiso irrestricto y permanente para que estos lamentables hechos no se vuelvan a repetir, pues no obedecen a políticas del Glorioso Ejército Nacional, que trabaja día a día desde su interior, por ser garante de los Derechos Humanos y el Derecho Internacional Humanitario.
Durante la ceremonia a la que asistieron medios de comunicación locales, vecinos y el padre de una de las víctimas, así como personal militar y civil, se realizó en conjunto, un acto simbólico en el que de forma respetuosa, se invitó a los presentes a encender la luz de una vela y a hacer un minuto de silencio para recordar a los fallecidos, y en señal de perdón, cerrar el capítulo de dolor abriendo las puertas de la reconciliación que tanto necesita la sociedad colombiana.