Al menos 1.100 dosis de la vacuna Pzifer-BioNTech debieron ser destruidas, luego de que un empleado de limpieza en un complejo médico desconectara por accidente el refrigerador que contenía el preciado fármaco contra el coronavirus.
Los hechos se registraron en las instalaciones de VA Boston Healthcare System, un conjunto de hospitales administrados por el Departamento de Asuntos de Veteranos de los Estados Unidos.
Kyle Toto, experto en asuntos públicos indicó que «los protocolos establecidos por el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades chino, la vacuna de Moderna debe llegar a las instalaciones receptoras refrigerada a temperaturas de entre -25 y -15 grados».
Tras su llegada, «se conserva en un rango entre 2 y 8 grados durante un máximo de 30 días antes de su administración a los pacientes”, añadió.
Bajo estas condiciones, la farmacéutica Pfizer-BioNTech indicó que las muestras ya no servían y fueron destruidas.
Sin embargo, se conoció que la Institución está en proceso de recibir una reposición de las dosis para evitar que los cronogramas de entregas se vean afectados por el incidente.
Foto: AFP