La contaminación del mudo está en aumento día con día. De acuerdo con el Banco Mundial estima que, para el 2050, los desechos a nivel mundial crecerán un 70%.
Es por esto que, la productividad sostenible se han vuelto un objetivo primordial en la agenda de las organizaciones y de los gobiernos. En el caso de Colombia, en 2018 se lanzó la Estrategia Nacional de Economía Circular, con el que se busca que las cadenas de producción y consumo transformen los ciclos de materiales, agua y energía en nuevos modelos de negocio.
Así que, las empresas se han enfocado en desarrollar actividades sostenibles y rentables con el aprovechamiento de los residuos y la generación de valor agregado en su cadena de suministros.
En el caso del Consejo de Empresas Americana (CEA), una asociación que agrupa más de 110 empresas de capital mayoritariamente estadounidense establecidas en Colombia, han implementado procesos exitosos que apuntan al aprovechamiento de residuos, y realizan investigación y desarrollos constantes para acelerar estas buenas prácticas.
Estrategias implementadas
Plástico reciclado: En el caso de Coca-cola, hoy en día cuentan con un 25% de plástico reciclado (PET), y su objetivo es elevar ese porcentaje al 50% en dos años.
Innovación sostenible: Por su parte, 3M ha implementado un modelo de gestión con base en innovación sostenible a nivel mundial, empleando prácticas de producción y criterios ambientales, tales como la adopción de las materias primas de menor toxicidad.
Contenido reciclado: P&G busca incrementar el contenido reciclado (PCR), apostando por productos más concentrados y, fomentando el uso de materiales alternativos, esto evitará el uso de unas 300.000 toneladas de plástico virgen.
PlayBack: La empresa Mattel busca recuperar los materiales y reutilizarlos para nuevos juguetes, desarrollar otros productos plásticos y generar energía a partir de desechos.
La ONU calcula que este modelo puede reducir hasta un 99% de los desechos de algunos sectores industriales y un 99% de sus emisiones de gases de efecto invernadero, y es por ello que se ratifica que la economía circular se ha convertido en una necesidad que se traduce en eficiencia y productividad para las mismas empresas.